Carlos Alexander de Sousa Rocha había sido denunciado por Elisa Carrió y Paula Oliveto como supuesto portador de valijas con dólares para pagar coimas a funcionarios argentinos y es investigado como uno de los presuntos valijeros por la ramificación del megacaso de corrupción de Odebrecht en la Argentina, por sobornos millonarios para que el gigante de la construcción de Brasil ganara contratos de obra pública.
La Justicia creía que De Sousa Rocha había entrado siete veces al país pero lo habría hecho en 30 oportunidades, entre 2007 y 2012, con estadías de entre dos y tres días en el país. Además, se cree que sería uno de los valijeros que llevaban coimas con plata al contado y que forma parte del circuito de los U$S 35 millones que Odebrecht pagó a funcionarios argentinos.
Algunas de las medidas que había reclamado Carrió con respecto al presunto valijero era que fuera citado a declarar y que se pidiera a Migraciones un detalle de sus entradas y salidas de la Argentina, entre otras. La legisladora hizo estas presentaciones ante los jueces federales Sebastián Casanello, Marcelo Martínez de Giorgi y Sebastián Ramos, que investigan causas por presunto pago de coimas y sobreprecios de obras de Odebrecht en el país.