El ministro de Salud, Ginés González García, señaló hoy que el país tiene "capacidad de abastecimiento propia y soberana de respiradores" para afrontar la emergencia sanitaria por el coronavirus y subrayó que está "trabajando en la idea de poner a disposición pública todos los recursos sanitarios de la Argentina".
González García formuló estos conceptos al exponer ante la comisión de Acción Social y Salud Pública de la Cámara de Diputados, que conduce Pablo Yedlin, que se realizó mediante el sistema de videoconferencia entre el ministro y los legisladores que conforman ese grupo de trabajo del cuerpo.
La reunión fue abierta por el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, quien agradeció "a los que entienden queno hay lugar para la miseria y la mezquindad" y comprometió el trabajo suyo y de sus pares "para lo que se nos pida desde el "frente de batalla".
En su exposición inicial, González García, aseguró que "hay respiradores, no es una cosa que falte", y dijo que "se ha trabajado con el proveedor que hay en el país para aumentar su producción, porque al ritmo de fabricación estaba previsto que los pedidos se terminaran de entregar en marzo del año que viene".
"Decidimos que se prohíba la exportación porque tenían algunos pedidos de otros países y que toda la producción la comprara la Nación y la distribuyan las provincias, para que el acceso a los respiradores no fuera para el que llegara primero o para el que tuviera más plata para comprarlos", aseveró.
En ese sentido, precisó que "hoy se fabrican 120 respiradores por semana, y en mayo se van a producir 200", lo que da "una capacidad de abastecimiento propia y soberana de respiradores".
También dijo que se trabaja "en la posibilidad de emitir un decreto por el cual se ponga a disposición pública todos los recursos sanitarios de Argentina" y que los mismo sean "administrados por cada una de las provincias".
"Nueva York es una referencia mundial en materia de salud, y no puede aguantar el ritmo de la expansión. Por eso nuestra estrategia es ganar tiempo, que "el coronavirus venga de a poco y tener conocimiento nuevo para aplicar", explicó.
El funcionario realizó un repaso comparativo entre las medidas preventivas tomadas en Argentina en relación al tiempo en que se tomaron en otros países, como Italia, Francia, España o China, donde las consecuencias de la pandemia han sido más graves.
"La ventaja que hemos tenido acá es que el virus llego después que en otros países. Y eso nos permitió aprender de las cosas que creemos que no han hecho bien otros países", remarcó.
También puso de relieve la importancia de rol del Ministerio nacional de Salud en un país federal, al señalar que "en el tema financiamiento, la potencia del Estado nacional es mucho más fuerte que la de los estados provinciales, en forma independiente".
"También es importante la coordinación para la distribución de insumos contra la gripe y el coronavirus, que hoy, paradojalmente, se da la situación que hay que hacer que las personas se vayan a vacunar pero que no se amontonen", graficó.
En relación a los reactivos para detectar la enfermedad, el funcionario indicó: "Hoy tenemos muchos y el último pedido es de medio millón. En algún momento se dejan de usar, porque por el diagnóstico cualquier problema respiratorio se trata como si fuera por el virus".
"Tomamos los recaudos de comprar los que pudiera ser comprado por existencia. Pese a que nos encontramos con la competencia de Asia, Europa y Estados Unidos, siempre hemos tenido reactivos", enfatizó el ministro tras recordar que "a nuestro país los casos llegaron más tarde".