El miedo al contagio de coronavirus, sobre todo en zonas como Asia y Europa, está modificando por completo las costumbres diarias de sus habitantes. En China, país donde apareció por primera vez el virus COVID-19 que causa esta enfermedad, las medidas que se toman son extremas.
Tal es el caso del "footshake", una manera de saludarse con los pies. Otro ejemplo es lo que sucede en las peluquerías, donde han surgido nuevas formas de trabajar para no entrar en contacto con los clientes.
Los estilistas del sur de China decidieron unir sus herramientas al extremo de largos palos y así cortan, lavan y peinan el cabello. El video que roza lo surrealista fue capturado por un peluquero llamado He Bing en la ciudad de Luzhou, en la provincia de Sichuan.
En las imágenes se puede ver a los empleados sosteniendo palos de más de un metro de largo con una brocha, una afeitadora y un secador de pelo. El comercio estuvo cerrado durante varios días, y para su reapertura, la peluquería promocionó el "corte de pelo a larga distancia".
