"Los jubilados van a tener su aumento y los medicamentos gratis que les prometí", había expresado Alberto Fernández, antes de los anuncios que brindó este viernes respecto a los cambios en jubilaciones, pensiones, la Asignación Universal por Hijo y otras prestaciones. Además se presentó una lista de 170 medicamentos gratuitos.
Pero, ¿cuál es el impacto real de las medidas sobre los jubilados? ¿Y cuál es la diferencia respecto a la fórmula que había implementado Cambiemos? La respuesta no es unívoca.
Las jubilaciones aumentarán un 2,3% más una suma fija de $1.500: para la mínima, representará el 13%.
En este sentido, según el oficialiemo, el 86,8% de los beneficiarios del sistema de seguridad social se verá beneficiado por la nueva "tablita": pasará de cobrar $14.067,93 a $15.891,49 (contra los $15.694,26 que hubiese percibido con el modelo anterior). La diferencia es de, aproximadamente, $200 pesos a su favor.
Sin embargo, no ocurre lo mismo con el resto de los jubilados y pensionados que cobran más de $16.200 y que constituyen cerca de 2 millones de personas. Estos empezarán a perder poder adquisitivo.
Ilustremos. Aquellos que perciban haberes de $20.000, recibirán una suba del 9,8% (en otras palabras, cobrarán $350 pesos menos que antes). Si la jubilación era de $30.000, pronto comenzarán a percibir $32.190: una recomposición de solo el 7,3%, lo cual se traduce en una pérdida de $1.278. Así, progresivamente. Un último ejemplo: para los que cobran $40.000, el aumento será del 6,05%.
"Es un día formidable, no nos olvidamos de los jubilados. El compromiso es con los que menos tienen", aseguró el presidente, acompañando por el titular de la Anses Alejandro Vanoli y la directora ejecutiva del PAMI Luana Volnovich.
Pero el tema genera debates. Desde Juntos por el Cambio, publicaron una dura publicación, donde aseguran que "más de la mitad de los jubilados va a cobrar menos de lo que le corresponde" y hablan de un "retroceso democrático".