Los ocho rugbiers que continúan detenidos acusados del crimen de Fernando Báez Sosa ya se retiraron del juzgado de Garantías de Villa Gesell para volver al penal de Dolores, donde se encuentran alojados. A las 9 comenzó la audiencia encabezada por el juez David Mancinelli.
Los acusados viajan en una unidad sellada y una escolta de dos móviles de la Dirección de Operaciones Especiales del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), en medio de insultos de vecinos que los vieron llegar e irse del juzgado.
Tanto los abogados de la familia del joven asesinado a golpes en Villa Gesell, como los defensores de los diez imputados, estuvieron presentes en la reunión. Durante la audiencia, los acusados contaron con la chance de hablar para que el juez tenga una primera impresión sobre ellos, aunque pueden elegir no hacerlo.
Justamente, las partes expusieron sus argumentos para que el juez defina si accede al pedido que llegó desde la fiscalía, en este caso, el dictado de las prisiones preventivas para los ocho.
Fabián Améndola, abogado de los Báez Sosa, adelantó a TN que se manifestarán en contra de la liberación de Juan Guarino y Alejo Milanesi. "Para nosotros todos son coautores", expresó.
Por su parte, Hugo Tomei, defensor de los rugbiers, pedirá el arresto domiciliario para Máximo Thomsen, Ciro, Luciano y Lucas Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Blas Cinalli y Ayrton Viollaz.
Luego de escuchar los argumentos de las partes, Mancinelli definirá si hace lugar o no a la prisión preventiva de los ocho rugbiers detenidos, impulsada por la fiscal Verónica Zamboni.