Esta primera semana de 2020, el Gobierno definiría un aumento salarial para trabajadores públicos y privados, que oscilaría entre 6 y 9 mil pesos. La medida elaborada por el Ministerio de Trabajo será oficializada a través de un decreto.
Según informa Clarín, este incremento sería a cuenta de futuros aumentos y estaría eximido del pago de aportes y contribuciones patronales, aunque aportaría al aguinaldo, las indemnizaciones y las vacaciones. Fuentes oficiales aseguraron al mencionado medio que el objetivo de la medida es "recomponer el poder adquisitivo de los empleados", perdido frente a la inflación.
"¿Qué es lo que pensamos hacer con los salarios? Así como se ha producido en el sistema previsional una dispersión importante, en los salarios ha pasado algo parecido. Hay sectores que han podido seguir bastante de cerca los índices de inflación, otros que han perdido algo; y sectores que perdieron muchísimo en esta economía que hemos tenido estos años", había dicho el ministro de Trabajo, Claudio Moroni durante la presentación en Diputados del proyecto de leyes de emergencia.
El monto final de la mejora salarial para los trabajadores privados dependerá de las capacidades de cada sector. El aumento también alcanzará a empleados de la administración pública, y tendría carácter remunerativo; se cobraría en febrero, con el sueldo de enero.