El presidente de Chile, Sebastián Piñera, se comprometió este miércoles a profundizar las investigaciones por las denuncias sobre "excesos" cometidos por las fuerzas de seguridad durante el estallido social que desde hace 12 días mantiene en vilo al país.
Pese a asumir ese compromiso, el jefe del Estado defendió en general la actuación de los carabineros durante las protestas y llamó a frenar a los "violentistas" que saquearon comercios y destruyeron o incendiaron bienes públicos y privados.
"El respeto por los derechos humanos es inquebrantable", enfatizó Piñera en un contacto con la prensa después de visitar en Santiago un hospital donde se recuperaban varios carabineros heridos en medio de enfrentamientos con manifestantes.
Aseguró el presidente que la gran mayoría de los agentes de seguridad actuaron de acuerdo con los protocolos que enseñan la manera en que debe actuar la fuerza pública en este tipo de casos, pero no descartó que haya habido excesos durante la represión de las protestas.
"Los excesos deben ser investigados", afirmó.Hizo hincapié en que se encargó personalmente en gestionar la visita a Chile de una misión de la alta comisionada para los derechos humanos de la ONU, que hoy inició sus investigaciones en el país sudamericano.
Desde el estallido de la rebelión, 20 personas murieron (al menos cinco de ellas por acción de agentes del Estado), otros cientos resultaron heridas y más de 9.200 detenidas, en medio de múltiples denuncias sobre aplicación de torturas, disparos contra civiles indefensos, detenciones ilegales, abusos sexuales contra apresados y todo tipo de maltratos.