La hermana de Miriam Romina Ibarra, una de las víctimas del doble femicidio cometido el sábado en la ciudad entrerriana de Paraná, denunció hoy que al presunto asesino, el efectivo Orlando Ojeda, "lo acomodaron en Prefectura" porque había tenido "problemas de género" con otra mujer cuando estaba en la Policía Federal, por lo que había estado "preso".
Además, resaltó que su familiar, de 35 años, había acusado ante un tribunal al agente, de 46, por haber ejercido "violencia" contra ella, a la vez que pidió que no se defina al efectivo como un "loco" para declararlo inimputable.
En esa línea, destacó que el agente, tras las muertes de las dos mujeres ocurridas el sábado a la noche, llamó al 911 y sugirió que los decesos fueron producto de un "accidente", porque dijo a la Policía que se le escaparon los tiros que terminaron con la vida de Ibarra y con la de Lidia Milessi, de 45 años.
Esa otra mujer se encontraba en trámites de divorcio y tenía tres hijos con Ojeda."Había denuncias (contra el agente); ella (por Romina) lo había denunciado (ante un tribunal) por violencia de género; él la golpeaba. La Justicia no actúa. Lo que yo tengo entendido es que él era de la Federal; (y luego) lo acomodaron ahí (en la Prefectura Naval)", dijo Jésica Ibarra.
Ibarra, además, llamó a la ciudadanía a asistir a la protesta prevista para hoy frente a los tribunales de Paraná y advirtió que la manifestación fue promovida porque Ojeda "tiene que estar" preso."Que no venga a querer hacerse pasar por loco, porque una persona loca no va a esquivar a las cámaras, no va a llamar al 911 y decir que se le escapó un tiro, y él hizo eso. Acá que no venga a hacerse pasar por loco; el tiene que pagar lo que hizo", reclamó.Y finalizó: "No fue un accidente. Y espero que la Justicia no tape esto, que él pague por lo hizo".