En la mañana de este sábado se informó que a raíz de diferentes condiciones climáticas y fenómenos naturales, Brasil perdió 89 millones de hectáreas de bosque en los últimos 33 años en total. Es decir que incluye los estados de Bahía y Maranhao. Más de la mitad de esta pérdida, 47 millones de hectáreas, se produjo en la Amazonia.
Por su parte, en el mismo período, en compensación, las áreas de pastura y plantación crecieron 86 millones de hectáreas, según reveló el diario Folha de San Pablo citando datos del sistema MapBiomas, una iniciativa del Observatorio sobre el Clima que monitorea todos los biomas del país sudamericano, informó Infobae.
Ante esta desesperada situación, se han realizado diferentes movimiento a nivel mundial, y recientemente se conoció que el presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, manifestó su preocupación por los incendios que devastan la selva del Amazonas, al tiempo que la canciller Angela Merkel le ofreció al presidente brasileño, Jair Bolsonaro, colaboración para proteger la región amazónica.
Merkel dialogó telefónicamente con Bolsonaro en la noche del viernes, según informó un portavoz gubernamental, en la que destacó en la comunicación su voluntad de cooperar con Brasil en la protección del Amazonas, indicó el portavoz, quien señaló que ambos líderes dialogaron además sobre la situación en Venezuela.
En tanto, el presidente de Alemania urgió a brindar una mejor protección a los bosques.
Steinmeier debatió sobre temas del futuro con el astronauta Alexander Gerst y la investigadora polar Antje Boetius en la fiesta de los ciudadanos en el castillo de Bellevue en Berlín, sede de la Jefatura de Estado.
"Tenemos que hacer nuestra parte para que la tala del bosque deje de ser atractiva", instó el mandatario ante una interrupción del público.
Por su parte, en Brasil se registran actualmente los incendios más graves de los últimos años. Desde principios de año, se han contabilizado más de 87.000 incendios en el país sudamericano, un 76 por ciento más que en el mismo período del año pasado.
Sin embargo, según la agencia espacial estadounidense NASA, el número de incendios sigue estando aproximadamente en línea con la media de los últimos 15 años. Entre 2002 y 2007, así como en 2010, hubo muchos más incendios.
En el marco del impacto que generaron los devastadores incendios y en vista de la controvertida política ambiental de Bolsonaro, se ha puesto en debate el sentido de la continuidad del Fondo de la Amazonía que reúne fondos internacionales de ayuda.
Este fondo es financiado principalmente por Noruega y, en una proporción mucho menor, también por Alemania. Con estos recursos se financian proyectos de protección ambiental, reforestación y desarrollo sustentable para la región del Amazonas.
