Sean Connery es una verdadera leyenda del cine. Este domingo, el famoso actor escocés festeja sus 89 años.
Célebre por su interpretación de James Bond, es considerado el mejor de la historia de todos los que se pusieron el traje de 007 (curiosamente, Connery fue el primero en hacerlo).
Ganador del Oscar por "Los intocables", de dos BAFTA y tres Globos de Oro, Connery también conquistó a la audiencia gracias al memorable papel de Henry Jones en "Indiana Jones y la última cruzada", donde fue dirigido por Steven Spielberg.
Sin embargo, 2003 fue un momento bisagra en su carrera y en su vida. El actor formó parte de la fallida producción "La liga extraordinaria", basada en el cómic de Alan Moore y Kevin O'Neill, que lo llevó a tener grandes discrepancias con su director, Stephen Norrington.
Tras su protagónico en el film, Connery se desencantó de Hollywood y se convirtió en casi un recluso, un poco a la manera de William Forrester, su personaje en "Finding Forrester" de Gus Van Sant, un escritor con ecos de J.D. Salinger.
Desde entonces, sus amigos suelen hablar por él públicamente, ya que casi no se muestra. Ya no asiste a ningún evento vinculado a la industria y la última vez que se lo vio públicamente fue en 2017, cuando fue captado por las cámaras ingresando a una barbería en Nueva York (los Estados Unidos).
El actor confirmó que se había retirado de la industria de manera irrevocable en 2006, cuando el American Film Institute le realizó una gala especial en su honor, donde se llevó a cabo un repaso de su extensa filmografía, cuyo puntapié fue la cinta de acción "No Road Back" en 1957.
"Estoy harto de estos idiotas, de la grieta que se generó entre las personas que saben cómo hacer cine y las personas que dan luz verde para que las películas se hagan", le expresó con sinceridad años atrás al portal Scotsman, en alusión a su falta de paciencia para lidiar con los estudios.
Si bien muchos fanáticos del escocés siguieron aguardando su regreso a las pantallas, su amigo Michael Caine se encargó de darles un baño de realidad. "No va a hacer otra película, le pregunté y dijo que no, que no quería", declaró su colega en una entrevista con The Telegraph. "El negocio del cine lo retiró, porque solo le ofrecían papeles de hombre viejo que no le interesaban", añadió.
En consecuencia, Connery decidió instalarse en Las Bahamas, donde reside actualmente, juega al golf, una de sus grandes pasiones, y donde disfruta de la vida con su mujer, Micheline Roquebrune.