Hace exactamente un siglo, la República Argentina reconoció la entonces llamada República Popular de Ucrania.
Para comprender el valor histórico que tiene este acontecimiento, celebrado ayer en la Embajada de Ucrania en Buenos Aires, Vía País conversó con el embajador de la nación europea en nuestro país, Valery Olefir.
“Antes que nada, hay que recordar el período extremadamente difícil del joven Estado Ucraniano a principio de su existencia. Fue uno de los períodos más importantes, pero también más complejos de la historia de nuestra milenaria nación”, dijo el diplomático, quien narró: “Recientemente, el 29 de enero pasado, hemos recordado a los Héroes de Kruty, al cumplirse 103 años desde que en la estación ferroviaria de Kruty tuvo lugar una batalla entre la pequeña unidad militar de 400 soldados, compuesta por cadetes y estudiantes de la República Popular de Ucrania (RPU) y el ejército ruso de los bolsheviques, formado por 4 mil hombres. Para el pueblo ucraniano, se convirtió en un símbolo del heroísmo y el sacrificio de la nueva generación en la lucha por la independencia”.
A la vez, el funcionario destacó: “Para mí, otra fecha memorable fue la etapa de la fundación del servicio diplomático ucraniano. Ya que el 22 de diciembre de 1917, se aprobó la Ley sobre el Establecimiento de la Secretaría General para Asuntos Internacionales, la primera estructura estatal del servicio exterior de Ucrania”.
Y contextualizó: “Entre los años 1918 y 1921, fueron establecidas las embajadas en Alemania, Austro-Hungría, Turquía, Bulgaria, Suiza y Finlandia; y dos misiones diplomáticas en Rumania y Suecia. Al mismo tiempo, en la UNR se llegaron a establecer más de veinte misiones diplomáticas de varios países extranjeros como el entonces Estado Austro-Húngaro, y países como Bulgaria, Georgia, Alemania, Turquía, Polonia, Rumania, Finlandia y otros”.
¿Cuándo Argentina comienza a vincularse formalmente con Ucrania? El diplomático ucraniano responde: “La delegación de la UNR participó en la Conferencia de Paz de París, mientras desempeñaba la función de una oficina de representación diplomática temporal de Ucrania en Francia. Fue específicamente allí donde Ucrania, representada por el conde Mykhaylo Tyshkevych llegó a tener el contacto con los representantes oficiales de la República Argentina, el embajador argentino en Francia, Don Marcelo Torcuato de Alvear. La respuesta casi inmediata argentina al pedido de reconocer a la UNR se dio a conocer por el famoso decreto del 5 de febrero 1921″.
“De esta manera -continuó el funcionario- la República Argentina se convirtió en el primer y, en aquel relativamente corto periodo de la existencia del estado ucraniano, el único país latinoamericano que reconoció la UNR y estableció relaciones diplomáticas con nuestro país”.
LOS AÑOS DE LA EX UNIÓN SOVIÉTICA Y LA RECONQUISTA DE LA INDEPENDENCIA
Se sabe que Mykola Shumytskyi, el nombrado embajador de la UNR en Argentina, logró arribar desde París a Buenos Aires, pero desafortunadamente para aquellos días, la joven república ucraniana sucumbió frente al avance de las hordas ruso-bolcheviques; y así, Ucrania volvió a perder su independencia y fue obligada a formar parte de la Unión Soviética por 70 años. Por consiguiente, durante un extenso periodo, Ucrania estuvo privada de la capacidad de definir y plasmar su propia política exterior.
Después de la Segunda Guerra Mundial, Ucrania fue un estado-fundador de la ONU y participó en la elaboración de la Carta de las Naciones Unidas: en la formación de la estructura, organismos e instituciones de la mayor organización multilateral del sistema internacional. Entre 1940 y 1950, la República Socialista Soviética de Ucrania se convirtió en miembro de varias organizaciones internacionales. De hecho, varias veces fue elegida como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU. Sin embargo, solo después de reconquistar la independencia en el año 1991, fue que la diplomacia ucraniana emergió; y el joven país comenzó a ser un actor relevante en las relaciones internacionales.
Al respecto, el diplomático comentó: “El papel protagónico de nuestro país se hizo visible en el compromiso por la solución de las controversias del orden global y su aporte a la cultura de la paz; como fue claramente evidenciado durante dos períodos de participación de la Ucrania independiente en el Consejo de Seguridad como miembro no permanente (2000-2001 y 2016-2017)”.
A la vez, consideró: “Durante los 30 años de independencia, los diplomáticos ucranianos han hecho un aporte considerable a la consolidación del Estado Nacional y la protección de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania. Hoy, Ucrania mantiene las relaciones diplomáticas con más de 180 países del mundo. Y puedo mencionar de la adhesión de nuestro país a la OSCE, el Consejo de Europa, la OMC y otras reconocidas organizaciones multilaterales. Son de destacar también otros logros diplomáticos como, la conclusión del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea y la abolición de visados para los viajes de ciudadanos ucranianos a 30 países europeos”.
LA APERTURA DE LA EMBAJADA DE UCRANIA EN BUENOS AIRES
Hace un siglo, en otro momento muy importante de la historia que vincula a ambos países, Argentina se constituyó, el 5 de diciembre de 1991, en el primer país latinoamericano en reconocer la independencia de Ucrania, apenas cuatro días después del referéndum por la independencia; y también, en el primer país de la región en establecer las relaciones diplomáticas oficiales con Ucrania, el 6 de enero de 1992.
Por tal motivo, la Embajada de Ucrania en Buenos Aires abrió sus puertas en marzo de 1993, en gran medida gracias a los esfuerzos de la colectividad ucraniana residente en la Argentina. “Celebramos el gran apoyo que ellos brindaron para la apertura de esa primera misión diplomática ucraniana. Y también, merece una puesta en valor el apoyo que se brindó en la etapa inicial de su organización y funcionamiento. Y en reciprocidad, la Embajada de Argentina en Kyiv empezó a funcionar en mayo del mismo año”, resaltó el diplomático.
UN VÍNCULO FRUCTÍFERO
Desde los primeros días, se iniciaron los contactos políticos entre los dos estados; y así los lazos han prosperado y los vínculos entre ambas naciones se han ido multiplicando a lo largo de los años. Ya en la primera década, se produjo el intercambio de visitas presidenciales, mientras los cancilleres de los dos países también materializaron visitas oficiales en forma mutua. En el transcurso de esos años, una decena de encuentros bilaterales se celebraron en el marco de organismos internacionales. Así, se fue desarrollando e instalando el oficio que rige hoy, donde existe entre ambos países el mecanismo de consultas políticas bilaterales a nivel de vicecancilleres.
El embajador ucraniano destacó: “Nuestros países comparten los valores universales y también coinciden en posiciones y principios sobre cuestiones clave acerca de la paz y seguridad en el mundo como el respeto al derecho internacional, la protección de los derechos humanos y libertades fundamentales, la no injerencia en los asuntos internos y el respeto por la soberanía nacional de los pueblos. Hoy, en el mundo globalizado, ambos países enfrentan desafíos, incluso aquellos desconocidos anteriormente, y es por eso que los lazos entre Ucrania y Argentina tienen que ser más sólidos que nunca antes”.
LA INMIGRACIÓN UCRANIANA Y EL AGRADECIMIENTO A LA REPÚBLICA ARGENTINA
Un fenómeno muy importante en el marco de estos 100 años de relaciones diplomáticas entre Ucrania y Argentina es, sin dudas, el de la inmigración europea. Continúa Olefir: “En esta fecha tan destacada, recordamos no solo el procedimiento internacional por el cual un Estado reconoce la existencia del otro, sino también la unidad de nuestros pueblos generada por la inmigración, ya que el inicio del movimiento migratorio desde Ucrania a Argentina se considera fijado en el 27 de agosto de 1887, cuando llegaron los primeros ucranianos a la norteña provincia argentina de Misiones”.
“En muchas ocasiones, el pueblo argentino nos ayudó repetidamente recibiendo ucranianos de otro continente, en busca de refugio, trabajo y, lo más importante, libertad”, resaltó el funcionario. “Así como Argentina recibió con los brazos abiertos a otros tantos miles de europeos que ahora son parte de esta gran nación, para 300 mil ucranianos, Argentina se convirtió en una tierra de oportunidades y desarrollo. Por eso, hoy las relaciones entre Ucrania y Argentina tienen 300 mil oportunidades, puentes e historias de amistad”.
Paralelamente, es sabido que la diáspora ucraniana le dio a la Argentina muchas personalidades valiosas, tanto ilustres como desconocidos para el público en general. Con su trabajo, esfuerzo, creatividad, valores y conocimientos hicieron un aporte significativo a la formación de la Argentina moderna.
“Esta historia debe seguir escribiéndose a través de ejemplos concretos de cooperación y logros, que mejorarán la vida de ambos pueblos por muchos centenarios consecutivos más”, concluyó Olefir.