Yesiel Díaz y su pareja Laura Vergel son médicos que dejaron Venezuela para trabajar en la Patagonia Argentina. Más allá del cambio radical en la temperatura, en Caracas ganaban US$ 8 y actualmente en Río Negro llegan a los US$2.000 por mes, 42 mil pesos de básico más otros 40 mil por guardias. A pesar del dinero, ellos contaron a Clarín que les "gustó mucho el lugar, la geografía y la gente nos recibió de manera muy cálida. Donde vamos nos ofrecen un mate".
Ambos son médicos generalistas y sus primeros trabajos fueron en restaurantes haciendo turnos de 16 horas para sobrevivir, mientras estaban a la espera de su DNI extranjero y la revalidación de sus títulos universitarios. En julio del año pasado se enteraron de la convocatoria del Ministerio de Salud a médicos venezolanos que buscasen radicarse en pueblos y localidades alejadas de la capital.
La propuesta incluía una vivienda, además del sueldo. El 7 de marzo de este año, Díaz y Vergel consiguieron los trámites necesarios y terminaron en Comallo, una pequeña localidad de 1.500 habitantes, ubicada a unos 100 kilómetros de Bariloche. Díaz, egresado de la Universidad de Rómulo Gallegos, contó que "acá encontramos la estabilidad que estábamos buscando después de todos los problemas políticos y económicos que ya se conocen de mi país".
"La Argentina ha sido muy generosa con nosotros", agregó. De hecho, su primer hijo será argentino, Laura está embarazada de ocho meses. "Va a ser argentino y va a nacer en Comallo. La Línea Sur es muy hermosa y con los años la gente ha mejorado su calidad de vida, ya hay internet, paneles solares, y nos gusta poder ayudar en este ámbito", indicó.
Otra doctora radicada en parajes alejados del país es Isi López que llegó desde Maracaibo a Choele Choel, a 332 kilómetros de la capital viedmense, donde necesitaban con urgencia una pediatra. Los 10 mil vecinos del pueblo venían reclamando que alguien cubra esa vacante.
"El proceso de validación del título me llevó más de un año y mientras tanto trabajé asistiendo a niños con discapacidad. Cuando salió lo del título tuve una entrevista en la Casa de Río Negro y después validé todo en Viedma", relató López, que es egresada de la Universidad del Zulia. "Mi proyecto es seguir acá, trabajar y con el tiempo perfeccionarme en alguna especialidad", manifestó.
Las autoridades provinciales calcularon que necesitan al menos 60 profesionales de la salud para cubrir puestos médicos en localidades alejadas de las ciudades más importantes de Río Negro. El Ministerio entrevistó a otros 18 generalistas y 2 pediatras venezolanos que realizarán el servicio sanitario provincial.
Por el momento son 24 profesionales de la salud oriundos de Venezuela trabajando en la provincia. Estiman que en todo el país serían 250 doctores aunque consideraron que ya habrían desembarcado más de 2.000 en los últimos dos años.
El director de gestión hospitalaria de la provincia, Daniel Avaca explicó que "la provincia mantiene la convocatoria a los venezolanos y a todos los médicos del país que quieran venir. La experiencia con los venezolanos ha sido muy positiva y todos los comentarios que nos llegan son buenos".