Este lunes por la tarde se presentó en la Casa de la Cultura de Ushuaia la 14º edición de la revista de divulgación científica "La Lupa", la cual viene elaborándose hace varios años de manera prácticamente autogestiva, con la fuerza y la voluntad que un grupo de la comunidad científica e investigadora de Tierra del Fuego ponen en movimiento para trasladar a la población los resultados de sus investigaciones y descubrimientos.
Una vez diagramada y publicada la revista ―con una tirada gratuita de 5 mil ejemplares aproximadamente― ésta se entrega en distintas bibliotecas, escuelas, restoranes y ámbitos públicos de nuestra provincia. Así, "la distribución que hacemos la apuntamos a un alcance masivo, porque esa es la idea: bajar el conocimiento", señalaron desde el Comité Editorial.
Para este tipo de eventos hay que tener presente que al trabajo ad honorem que realiza el Comité Editorial de la revista se suma un desguace y un desfinanciamiento por parte de Nación que sujeta a este tipo de proyectos a condiciones desfavorables para concretarlos. De modo que la publicación ininterrumpida de esta revista resalta, de hecho, el compromiso y el trabajo constante que realizan nuestros científicos y científicas en la provincia fueguina.
La revista ―que cuenta con una alta calidad en cada una de sus aristas: registro de los textos, léxico, imágenes, diseño e impresión― fue presentada en un clima de mucho entusiasmo y reflexión por sus protagonistas y colaboradores. En este sentido, el ministro de Ciencia y Tecnología Daniel Martinoni señaló que "el financiamiento que nosotros hacemos es, precisamente, para acercar todo el conocimiento científico a la población general". Al respecto, sentenció que "el conocimiento no es sólo para los circuitos científicos, debe ser para toda la gente".
Por su parte, el director de CADIC, Gustavo Ferreyra, dijo que "seguimos en pie incluso luego de padecer pormenores de todo tipo, porque esto es lo que nos apasiona y para eso nos hemos especializado: para seguir rescatando toda la riqueza científica que otorga Tierra del Fuego".
María Granitto, ambientóloga del CADIC e integrante del Comité Editorial de la revista, sostuvo que "el trabajo que hacemos para amenizar el lenguaje técnico cuenta con varias herramientas, como incluir un glosario en cada artículo en caso de no poder omitir algún tecnicismo, presentarle a cada colaborador/a una descripción del estilo que persigue la revista, traducir todo el lenguaje técnico a un lenguaje más llano, más coloquial".
Respecto del empobrecimiento que padecen las áreas universitarias, de investigación y de ciencia y tecnología a causa de las políticas nacionales, Granitto remarcó que "generar ciencia o conocimiento no es menos importante que divulgar y extender éstos a la población general. Hoy por hoy el CADIC ya suma cincuenta años, de manera que, más allá del contexto nacional tan desfavorable, nosotros utilizamos todo lo que está a nuestro alcance para difundir nuestro trabajo, en este caso a través de 'La Lupa'".