El caso mas dramático que motivó la intervención de bomberos y Defensa Civil, fue el de una casilla alpina que una familia tenía en su predio de calles Colón y 11 de Julio.
La casilla estaba deshabitada, y había sido vendida para su reparación, colapsando la estructura a causa de las fuertes ráfagas de viento.
La estructura fue apuntalada para evitar voladuras de otros materiales, sin que milagrosamente resultaran terceros heridos.