Cecilia Ousset y José Gijena, los médicos que fueron denunciados por “homicidio agravado” después de practicarle una cesárea a la nena de 11 años que había sido violada en Tucumán, publicaron una carta en las redes sociales dirigida a sus pacientes.
Los letrados intervinientes pretenden que los profesionales, que atendieron a la chica porque todo el resto del plantel del Hospital Eva Perón se negó, sean condenados a prisión perpetua por homicidio agravado. La beba que nació producto del procedimiento murió poco después por complicaciones respiratorias.
La carta de los profesionales dice lo siguiente: “Para empezar queremos decirles que estamos muy bien nosotros y nuestros hijos. Ellos están felices de su nuevo colegio.
Seguimos atendiendo en consultorio y quirófano normalmente y como siempre.
Nos sentimos apoyados por la comunidad y confiamos en que la persecución judicial pase lo antes posible, ya actuamos bajo las normas legales vigentes en Argentina a pedido de las autoridades del gobierno.
No podemos negar la sorpresa y la conmoción ante la realidad de las niñas y adolescentes violadas y torturadas en nuestra provincia.
Queremos que piensen solo en ellas y pongan su esfuerzo en frenar esas prácticas perversas. No se preocupen tanto por nosotros, que estamos bien representados por abogados de Andhes y Cladem.
La vida sigue pero todos somos responsables de terminar con la naturalización de las violaciones y los embarazos forzados (especialmente en niñas).
Tucumán debe ser una provincia decente con infancias felices. Ese es el objetivo. Por nuestras hijas y posibles nietas, por sus hijas y nietas, seguiremos en la lucha con firmeza y sobre todo tranquilidad.
Las abrazamos fuerte y sepan que gracias a ustedes cada día aprendemos más sobre los derechos de las mujeres.
En cuanto conocimos la realidad de Lucía pusimos fin a su tortura.
¿Cuántas semanas hay que esperar para frenar un tormento? Para nosotros ni un solo día.”