Efectivos de la Comisaría de Delfín Gallo y de la Unidad Regional Este (URE) trabajan en la investigación de un presunto caso de abuso sexual. El sospechoso fue identificado y se esperan instrucciones de la justicia para avanzar en la causa.
La madre de un pequeño de tres años denunció que su hijo fue víctima de un presunto abuso sexual por parte de un vecino de 15 años. De acuerdo a su relato, su hijo regresó alrededor de las 15.30 llorando a su casa y dolorido. Le contó que su vecino lo había tocado en sus zonas íntimas y lo había amenazado con pegarle con una piedra en la cabeza si contaba algo de lo sucedido a sus padres. El pequeño fue llevado al CAPS y luego al Hospital del Niño Jesús, donde fue asistido.
Inmediatamente, los efectivos tomaron intervención y lograron identificar al adolescente acusado. Se realizaron todas las actuaciones de rigor y se le dio intervención a la Unidad Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual I° para recibir las instrucciones pertinentes después de los exámenes médicos de rigor.
El jefe de la Zona II de la URE, comisario inspector Mauricio Álvarez y el jefe de la Comisaría, subcomisario Ricardo Medina, informaron que se encuentran expectantes a la decisión de la justicia para proseguir.
Durante toda la jornada de este viernes, estuvieron a cargo de garantizar que no se generen incidentes en dos protestas que se habían generado por la denuncia. Vecinos y familiares del pequeño se presentaron en la casa del acusado y luego en la comisaría.
“En horas de la tarde, la Unidas Fiscal interviniente se comunicó por vía telefónica con la madre del niño y tras ese diálogo y una actitud mediadora de los efectivos, se logró descomprimir la protesta. Aun así, se asignó una consigna preventiva, pero está todo tranquilo” señaló Álvarez.