El futuro ya llegó, y eso es innegable, más aún cuando se conocen hechos como el siguiente: un grupo de 50 astrónomos descubrió un nuevo planeta, que puede ser habitable, dentro del Sistema Solar, y con características muy similares a las de la Tierra.
Fue bautizado como Wolf 1069 b, y se perfila como un candidato idóneo para buscar indicios de agua y demás procesos biológicos. Además, su tamaño es parecido al de la esfera terrestre.
El selecto grupo de astrónomos, de 50 nacionalidades diferentes, comunicó que también podría ser un lugar potencialmente habitable para humanos.
El Wolf 1069 b orbita alrededor de la estrella enana roja Wolf 1069 y está situado en la constelación Cygnus, a 31 años luz de distancia de la Tierra.
Este hallazgo se enmarca en los más de 5.200 exoplanetas que los científicos han descubierto en las últimas décadas, pero lo cierto es que menos de 200 de ellos son rocosos, por lo que la posibilidad de que Wolf 1069 b sea habitable conmociona a todo el universo astronómico.
Las características del nuevo planeta parecido a la Tierra
Lo sorpresivo de Wolf 1069 b es que su suelo es sólido con 1,26 la masa de la Tierra y 1,08 su tamaño. Al orbitar alrededor de una estrella, termina siendo un candidato ideal para la existencia de agua en su superficie.
“Cuando analizamos los datos de la estrella Wolf 1069 b, descubrimos una clara señal de baja amplitud de lo que parece ser un planeta de aproximadamente la masa de la Tierra”, fue el informe de Diana Kossakowski, astrónoma del Instituto Max Planck de Astronomía en Alemania y principal cabeza de la investigación.
“Gira alrededor de su estrella en un plazo de 15,6 días a una distancia equivalente a una 15ª parte de la separación entre la Tierra y el Sol”, agregó.
Otro dato a tener presente es que este exoplaneta se encuentra dentro de la zona habitable de la estrella que orbita. Asimismo, su período orbital es mucho más corto, solo de 15,6 días. Esto genera que reciba aproximadamente el 65% de la radiación solar que percibe la Tierra.
Todo ello hace que su perspectiva de habitabilidad sea bastante importante, con temperaturas relativamente “normales”, con una media de -40,14 C (-40,25 F).
Un exoplaneta sin rotación
Lo que también lo hace único a Wolf 1069 b es que no tiene rotación, por lo que un hemisferio siempre se encuentra del lado de la luz, mientras que el otro siempre está en la oscuridad. Algo parecido con lo que sucede con la Luna.
Esto decanta a que el exoplaneta no tiene ciclos de día y noche. Sin embargo, los investigadores sostienen que podría ser habitable en su lado “diurno”.