El gobernador Omar Perotti intervino por 180 días el Ente Administrador del Puerto de Reconquista, dejando al frente a Martín Deltin. No se trata de una medida menor, teniendo en cuenta el fuerte peso que tiene Vicentin en el organismo.
"Desde que asumí el rol de director del ente, en enero pasado, vengo observando que el ente no estaba funcionando ajustado a las normas vigentes. Por eso hemos elevado varios informes, desde febrero a la fecha, pidiendo que se tomen medidas para normalizar la situación", indicó Deltin al sitio de economía y negocios Punto biz.
Entre las irregularidades mencionadas se encuentran la superposición de cargos de algunos integrantes del ente y el nulo control de las concesiones, donde precisamente tiene mucho peso Vicentin. De hecho el grupo agroexportador participa activamente de la concesión de la Terminal A del puerto a través de la firma Ríos del Norte.
De acuerdo al interventor, existe una cláusula de esa concesión que obliga a esta firma a manipular una carga mínima de 200.000 toneladas por año, pero la misma no se cumple desde 2004. "El puerto ha cesado y abandonado su destino comercial, dando solo cabida a la actividad recreativa privada, en abierta y prístina violación del destino previsto por la ley", sostuvo.