Brian Fernández volvió a consumir drogas y abandonó su equipo en la MLS

El santafesino había sido suspendido en 2015 tras dar positivo en dos controles antidóping.

Brian Fernández volvió a consumir drogas y abandonó su equipo en la MLS
El delantero se incorporó a los Portland Timbers procedente de Necaxa\u002E (Sean Meagher/The Oregonian via AP)

Cuando parecía que había encontrado su lugar y los problemas de drogas habían quedado atrás, Brian Fernández tuvo una nueva recaída que lo alejó de las canchas en el fútbol estadounidense. El ex delantero de Racing decidió iniciar un tratamiento de rehabilitación después de semanas complicadas en los Portland Timbers.

A través de un comunicado publicado este lunes, la Major League Soccer (MLS) anunció que el jugador ingresó de manera voluntaria al Programa de Abuso de Sustancias y Salud del Comportamiento de la entidad. A partir de esta decisión, los médicos a cargo de atenderlo serán quienes le den el permiso para reincorporarse a las prácticas y volver a competir.

El santafesino venía en ascenso después de una gran temporada en el Necaxa mexicano, la cual le valió su desembarco en la vecina liga norteamericana. La franquicia pagó una cifra récord por él, 12 millones de dólares, y el atacante lo retribuyó rápidamente con 5 goles en sus primeros 6 partidos.

Según informó el sitio Oregon Live, Fernández tuvo un primer semestre excelente y terminó la temporada regular de la MLS con 11 tantos en 19 encuentros. Desde entonces su rendimiento bajó y en el último mes había jugado poco y nada. Inicialmente los Timbers informaron que padecía un "virus estomacal", pero ese diagnóstico quedó en duda ante el reciente anuncio.

La semana anterior, el delantero fue expulsado durante el empate entre Portland y Kansas City Sporting. A poco de haber cumplido 25 años, el deportista enfrenta ahora nuevos problemas por consumo de drogas ilegales tal como le ocurrió en 2015, cuando recibió una suspensión de un año que se prolongó seis meses más por sendos controles antidóping positivos. Después de cumplir con la sanción, el jugador quedó marginado por sus problemas de conducta y debió emigrar hasta que el año pasado recuperó su nivel en el fútbol chileno.