Pablo Jerez fue noticia la última semana por la triste historia que le toca atravesar debido a la enfermedad de su hija Zoe, y a la posibilidad de quedarse sin obra social para cubrir su tratamiento. En las últimas horas apareció la posibilidad de empezar a trabajar en una obra de construcción, pero finalmente la chance se pinchó.
"Yo estoy agradecido a este muchacho porque nos quiso ayudar y hasta se ofreció a llevar a Zoe a Cuba para realizar un tratamiento de regeneración del tejido del cerebro", comenzó diciendo el ex jugador de Boca y Colón al respecto.
Sin embargo frenó todo al ver que toda la operación se daba en negro. "A mí me entró la duda cuando todo era sin un papel de por medio y yo no lo quise hacer así. No llegué a un acuerdo, pero igual lo valoro porque intentó ayudar, pero no era la manera indicada. Lo evaluamos con mi señora y creímos que era lo más razonable el no aceptar la oferta", dijo a TyC Sports.
Jerez, de 34 años y ex campeón del mundo con Boca, tiene a una hija de 15 años que padece hidrocefalia. Días atrás había señalado que se vio obligado a vender todas sus camisetas para cubrir los costos del tratamiento, y ante la posibilidad de quedarse sin club, planteó el riesgo de perder su obra social.
Desde Midland aseguraron que le renovarían el contrato las veces que sean necesarias para que Futbolistas Argentinos Agremiados le sostuviera la cobertura, y posteriormente Boca Social se contactó con él para ayudarlo.
Luego apareció este empresario de la construcción, que le planteó la posibilidad de retirarse y seguir trabajando en este rubro, pero finalmente no prosperó.