Varias zonas anegadas en San Nicolás y Pergamino por el fuerte temporal de viento y agua que este miércoles sacudió a gran parte del norte bonaerense. En Ramallo también es preocupante la situación por la abrupta crecida del Paraná, que ya rebasó por 12 centímetros el nivel de alerta.
El registro ascendió a 3,62 metros cerca del mediodía por los más de 100 milímetros que cayeron, un nuevo récord desde la última inundación en 2016.
Personal de Prefectura viene reuniéndose periódicamente con las autoridades municipales, puesto que se complica cada vez más la comunicación con los ribereños. Los patrullajes son constantes y se trata de resguardar no sólo la jurisdicción, sino también el área de las Islas Lechiguanas, en Entre Ríos. Por el momento, no hay evacuados pero en caso de necesitar asistencia, el número de contacto es el 106 (Emergencias Náuticas).
"Cayeron 120 milímetros en 4 o 5 horas, mucho caudal de agua en poco tiempo, pero por suerte las obras hidráulicas que se vienen llevando adelante están funcionando muy bien, produciendo un buen escurrimiento del agua", refirió Martín Maidana, secretario de Seguridad, respecto de la actual situación en la villa y el pueblo.
Asimismo, instó a los vecinos a pedir ayuda “para tener una respuesta más rápida ante un caso de emergencia”.