Si bien todavía son incipientes las alianzas para dar pelea en las urnas el próximo año, Manuel Passaglia, ahora al frente del Ejecutivo por el cargo que tomó su padre Ismael en provincia, hizo un balance de este 2018 y no descartó la candidatura.
"No se habló nada todavía, en Argentina en seis meses pasa mucha agua bajo el puente y el año que viene hablaremos entre todos. La palabra de Ismael es la de mayor peso y mas allá de quien sea el candidato, lo importante es que podamos seguir con el crecimiento y el desarrollo", refirió, aunque asoma como una de las figuras más fuertes dentro del partido.
Respecto de sus casi dos años de gestión, el actual líder del Ejecutivo no vaciló: "Somos un equipo. Más allá de la obra pública, el ciudadano recobró la confianza en el municipio. Ese es nuestro mayor logro y el desafío para adelante es lograr que los 160 mil nicoleños nos pongamos la camiseta de la ciudad y entendamos que es nuestra, que nos tenemos que juntar más allá de las diferencias. Si nos juntamos podemos hacer cosas que muchos pensaban imposibles".
Uno de los caballitos de batalla fue, sin dudas, la obra pública. De hecho, el 53% del Presupuesto pasado se destinó para tal fin y se prevé mantener el nivel.
“Invertir en obra pública no sólo nos lleva a crecer como ciudad, sino a mantener el nivel de actividad en tiempos complicados”, sostuvo. En el distrito genera empleo para unas 1500 familias y es una buena oportunidad para las pymes locales.
