Este martes debió ser evacuado el edificio de la Escuela Normal por un escape de gas y las clases permanecieron suspendidas. La semana pasada, otros dos colegios denunciaron anomalías y reabrió el debate sobre la seguridad en los establecimientos educativos del ámbito público.
"A principios de marzo se procedió a la inspección que se conoce como 'Riesgo de Inicio', mediante la cual se constata que los artefactos funcionen correctamente. Se encienden los calefactores, los hornos y termotanques. Si algo no funciona de manera adecuada, se procede a trabajar en la reparación de la falla para garantizar condiciones de seguridad óptimas", sostuvo la vicedirectora del Consejo Escolar, Malena Albert.
En tanto, la constatación de un desperfecto eventual durante el transcurso del ciclo lectivo supone una responsabilidad civil de las autoridades de cada institución.
"Los controles preventivos funcionan y se realizan rigurosamente. De hecho, ya estamos pensando en 2019", refirió Albert, y comentó que "recibimos más de 50 llamados diarios por diferentes situaciones".
Asimismo, puso el foco en la unidad de acción para dar una respuesta inmediata: "Los directivos tienen nuestros teléfonos. Hay veces en que nos avisan de una falla a las 6 de la mañana y otras a las 11 de la noche". El tema no es menos sensible tras la tragedia de Moreno que le costó la vida a una docente y un auxiliar.
(Fotografía: El Norte)
