Esta medianoche comenzaron a regir los nuevos aumentos para las tarifas de taxis y remises, que elevaron el valor del servicio un 20% a un año de la última actualización.
La bajada de bandera para los taxis pasó a costar $33, y se incrementará en $1,80 por cada 80 metros recorridos o por cada 60 segundos de espera. Para el caso de los remises, la tarifa única para iniciar el viaje es ahora de $34,80, con un adicional de $2,40.
La suba tuvo el visto bueno el jueves pasado en el Concejo, y el nuevo esquema entró en vigencia con la promulgación del Ejecutivo.
"Aumentaron todos los insumos que hacen a nuestra movilidad, por eso creemos que con ese valor vamos a poder mantener el servicio, con coches acordes y en buen estado", había manifestado semanas atrás Eduardo Martín, titular de la Federación local de Conductores de Taxis.