Hace seis días que Roxana Cánovas está luchando por su vida luego de haber sido atropellada en una esquina de Villa Mercedes, San Luis. La mujer estuvo primero en terapia intensiva del Policlínico Regional y luego fue trasladada a Río Cuarto. Alfredo Szuma Volmer es el conductor que aparentemente la arrolló y luego siguió su camino, no se detuvo a auxiliarla. Las cámaras de seguridad de un negocio captaron el terrible momento.
Cuando el hombre trató de explicar qué había sucedido dijo que recordaba solo lo que ocurrió antes y después del accidente, pero puntualmente del momento del choque no tiene registro, dejando entrever que quizá sufrió un ataque epiléptico.
Szuma Volmer de 54 años fue arrestado el viernes pasado por orden del juez Santiago Ortiz, está detenido e imputado por "lesiones gravísimas culposas agravadas por darse a la fuga, por no intentar socorrer a la víctima y por conducir con exceso de velocidad".
El hombre fue inmediatamente indagado, pero se abstuvo y su abogado pidió seis días de prórroga del arresto. Pese a su silencio ante el juez Contravencional y Correccional, cuando estuvo demorado en la Comisaría 8ª, antes de irse de la seccional, le tomaron declaración y, en esa oportunidad, Szuma Volmer habló.
Le habría dicho a los efectivos policiales que el lunes, alrededor de las diez de la mañana, salió en su auto, un Ford Galaxy, hacia Riobamba y Las Heras. Iba a lo de un tal Coria, a "suministrarle medicación". Según afirmó fue Roxana, su esposa, de la que no recordaba el domicilio, quien le pidió que le alcanzara los remedios al otro hombre.
Luego cerca de las doce se fue con Coria de Riobamba y Las Heras, en su auto. No tenían que ir lejos, apenas a unas tres o cuatro cuadras de allí, hacia el oeste. Aseguró que lo último que recordaba de ese momento es que subieron a su auto. "Después de eso no se acuerda qué más ocurrió hasta que una motociclista policial comenzó a hacerle señas y le antepuso su rodado para hacerle descender la marcha", trascendió.
Dice que en ese instante no entendía nada de lo que pasaba, ni siquiera se ubicaba en tiempo y espacio. Los efectivos le preguntaron si toma alcohol o consume algún medicamento, y Szuma respondió que no bebe, pero que sí toma dos remedios, que tiene prescriptos desde hace 17 años, porque padece epilepsia.
Después de atropellar a la mujer y pasarla por arriba con su auto, siguió la marcha unas 25 cuadras, hasta que la Policía lo detuvo.
La mujer de 43 años tiene fracturas en la pelvis, un pómulo y en el hombro derecho. Además, múltiples golpes y contusión pulmonar. Por su estado fue internada en terapia intensiva y permanece en coma inducido con respiración mecánica.
Fuente: El Diario de la República.