Este sábado en la disco La Bohemia, de la capital puntana, la comunidad LGBTQ de San Luis cuenta las horas para descorchar las botellas, abrir el telón y coronar la reina y el rey nacional del orgullo 2018.
Son diez participantes que desean el cetro, que aún llevan la sanluiseña Maia López y el cordobés David Centurión. "Son representantes de distintas asociaciones que van a ser evaluados por el trabajo que hacen en post de la inclusión y de la comunidad", contó Maia la reina actual, que además de entregar la corona, será jurado en esta edición.
Por su parte, Agostina Muñoz, soberana del certamen en el 2012, también estará en el lugar de los evaluadores y destacó a El Diario de la República, la militancia a la hora de elegir a los ganadores: "Esto no es sólo un concurso de belleza. Esa parte es un 30 por ciento del total".
Muñoz y López, la únicas representantes de la provincia que ganaron el concurso nacional, conformarán el jurado junto a integrantes de la Federación Crefor (Córdoba), San Luis Diversa, ATTTA San Luis y Rapsodia Club (San Juan), entre otros referentes.
Además de la pasarela, la noche del sábado promete el show de un transformista, una drag queen y una coreografía local. Cuando el cielo puntano muestre los primeros rastros del amanecer dominical, los nuevos monarcas ya lucirán sus coronas. Será un premio a los valores con los que día a día ayudan a defender los derechos y la igualdad de lesbianas, gays, bisexuales, transgéneros y queers.
