Entre los anuncios del Mega Plan "Sueños Puntanos", el gobernador de San Luis Alberto Rodriguez Saá anunció que enviará a la Legislatura "un innovador" proyecto de ley con el que quiere cambiar y revolucionar el sistema penitenciario de la provincia.
"Después de caminar unos 600 u 800 metros por un pasillo que va a tener una suerte de alambrado o reja al costado, va a quedar libre en un pueblo que estará dentro de la cárcel y ya no verá ese alambrado", dijo el mandatario para graficar el nuevo perfil carcelario que pretende para la provincia.
El objetivo es que sea "un centro de reinserción social" para que los internos del Servicio Penitenciario Provincial vivan en "una suerte de pequeña ciudad". Y allí puedan desarrollar distintas actividades comerciales y sociales "con otras que están afuera del penal".
Rodríguez Saá afirmó que en ese lugar "los presos se sentirán libres y podrán trabajar; ir a la biblioteca, tener una carpintería, peluquería, panadería, hacer negocios, con lo que sepan y quieran hacer", tanto hombres como mujeres en el mismo pueblo, junto con chicos en el mismo pueblo".
El lugar podrá ser visitado todos los días por los familiares y estar "el tiempo que quieran". Y podrán entrar las personas que, por ejemplo, "quieran cortarse el pelo".
El interno con su trabajo se quedará "con el 80% de lo que gane", mientras que el 20% será para el Servicio Penitenciario Provincial, "como una especie de gasto de consorcio o alquiler", según puntualizó durante el anuncio que según El Chorrillero fue muy celebrado por los integrantes de su gabinete.
Aseguró además que el edificio estará listo en ocho meses y que por eso "hay que trabajar en la legislación, las condiciones y los requisitos", porque también "hay que hacer contratos". Por otra parte destacó que un ejemplo similar hay en Uruguay, donde estuvieron de visita: "Queremos hacer algo igual o mejor".
Hace un año, la ahora senadora nacional Eugenia Catalfamo acompañada por el entonces interventor del Servicio Penitenciario Provincial, Hugo Scarso visitó la cárcel de Punta de Rieles, en Montevideo, el modelo de penal que funciona como un espacio de contención y de reinserción social al que el Gobierno provincial busca imitar, publicó SanLuis24.