Verdaderamente espeluznante fue lo que le tocó vivir a una joven sanjuanina el miércoles pasado en una casa de Villa Las Colminas en Pocito, cuando su ex pareja la encerró en una habitación junto a sus tres hijos, la abusó y la desmayó a golpes. Este martes, el sujeto, cuyas siglas son A.J.A. (el nombre no se publica para preservar a la víctima), fue condenado a 3 años de prisión de cumplimiento condicional y no irá a la cárcel.
Según publicó Diario de Cuyo citando fuentes judiciales, la joven madre tuvo una relación de pareja durante 2 años con el imputado. Producto de este vínculo, tuvieron dos hijos, uno de dos años de edad y otro de 8 meses. De igual manera, se supo que siempre fue una relación conflictiva, con violencia física y verbal y también con varias denuncias radicadas en la Comisaría de la Mujer desde octubre de 2020.
Además, en noviembre de 2021, el violento cumplía con el régimen de visitas de sus hijos y, según denunció la mujer, le sustrajo 18 mil pesos. Como consecuencia, ambos discutieron y el hombre la tomó del cabello, la arrastró hacia un dormitorio y la encerró con candado. Luego de que ella hiciera dormir a los niños, él la insultó y la golpeó con un palo de escoba en la espalda, brazos y piernas.
Según las fuentes de la investigación, le habría dicho “cuando me estabas gorreando no te dolía”. Así fue como también la golpeó con el palo en la cabeza hasta que ella se desvaneció. Cuando despertó, salió corriendo y semidesnuda a pedir auxilio y fue así como intervino la Policía. Recién el 16 de febrero de este año, la Justicia ordenó la captura de A.J.A.
Pero las cosas, lamentablemente para la mujer víctima del calvario, no terminaron ahí. Es que, el miércoles 29 de junio, el hombre llegó nuevamente a la casa de su ex pareja en Villa Las Colminas, Pocito. Según indicaron, él estaba con amigos consumiendo drogas y bebiendo alcohol. En un momento dado, el denunciado encerró a la mujer en una pieza junto a sus hijos y trabó la puerta con pasador.
Al otro día (jueves 30), el hombre continuó dejando encerrada a la joven y, en un momento en horas de la tarde, comenzó a golpearla en la cara e intentó asfixiarla. Posteriormente, la tiró sobre la cama e intentó ahorcarla con una colcha, mientras ella forcejeaba y sus hijos de 5, 3 y 1 año de edad lloraban al costado de la cama. Luego, el sujeto tomó a la mujer por el cuello con ambas manos y le dijo: “Vas a salir de acá pero muerta”.
La terrorífica escena no terminó allí. Él, bajo el estado de estupefacientes y alcohol, le rompió una remera que ella tenía puesta, delante de los niños y le pegó una patada en la vagina, lo que le provocó el desmayo a la mujer. “Te voy a matar y después me voy a matar yo”, le decía. A los minutos, la joven despertó mientras su hijo le preguntaba: “Mamá, ¿estás muerta?”.
En un momento dado, el hombre rompió una botella de cerveza que estaba a un costado de la cama y se provocó un corte en la muñeca izquierda. Por esta herida, comenzó a sentirse mal y eso permitió que la víctima pudiera salir de la casa a pedir ayuda. Ella estaba desnuda y cuando salió, el sujeto la agarró de los pelos y la volvió a meter adentro de la casa, pero esta situación fue observada por los vecinos, quienes llamaron a la Policía. Así, los efectivos policiales llegaron al lugar e intervinieron, llevándose detenido al hombre.
A pesar de todo este calvario sufrido por la mujer, el agresor no irá a prisión. De hecho, en un juicio abreviado, fue condenado a 3 años de prisión de cumplimiento condicional por los delitos de Hurto Simple, Privación Ilegítima de la Libertad (dos hechos), Lesiones Leves Agravadas por el Vínculo (dos hechos), Abuso Sexual Simple y Amenazas en Concurso Real y en calidad de Autor. Por otro lado, no podrá acercarse a la víctima de ninguna manera y deberá cumplir con distintas reglas de conducta.