Tal como lo solicitó la Fiscalía y querella, este lunes en la mañana el juez Carlos Peluc condenó a prisión perpetua a Sergio Ezequiel Mereles (26). El sujeto fue hallado culpable de violar, asfixiar y matar a su sobrina de 4 años, identificada como Zoe Aballay, en 2016. Después de dos semanas, este lunes finalizó el juicio en la Sala II de la Cámara Penal con un fallo favorable para la familia de la víctima.
El crimen de la pequeña a manos de su propio tío ocurrió en la madrugada del 19 de noviembre. La nena llegó sin vida al Hospital Rawson en compañía de su abuela, quien estaba al cuidado de la menor porque su mamá trabajaba. En su momento la mujer declaró que su nieta se había ahogado con la comida, sin embargo la autopsia reveló que había muerto estrangulada y antes había sido brutalmente violada.
Mereles quedó detenido por ser el principal sospechoso. Pero también su mamá, Marcela Barrionuevo, abuela materna de la víctima, recibió arresto domiciliario y fue investigada por "encubrir" el hecho. Ambos llegaron a juicio y recibieron la condena que había solicitado la fiscal Leticia Ferrón de Rago, a pesar del pedido de "absolución" de la defensa por el beneficio de la duda.
Finalmente el sujeto recibió la pena más dura (35 años) por abuso sexual triplemente agravado por ser menor, por el vínculo y por causarle la muerte. Mientras que Barrionuevo fue condenada a 3 años de cárcel efectiva por amenazas y no por la muerte de la pequeña, pese a que la familia de Zoe sostuvo que la mujer quiso ocultar el aberrante crimen de su hijo. Mereles volverá al Penal de Chimbas, mientras que su mamá aún no será trasladada a la cárcel hasta que el fallo sea efectivo.