A través del Plan de Regularización de Deudas, siete mil familias sanjuaninas lograron cancelar sus viviendas.
Esta moratoria comenzó en diciembre de 2017 con el objetivo de normalizar la situación de los adjudicatarios poniéndose al día con las cuotas de sus viviendas o gestionando un nuevo plan de pago. En un principio, la fecha de finalización del plan estaba prevista para el 30 de junio pero debido al interés de la comunidad las autoridades decidieron extenderla hasta el 31 de julio.
Los destinatarios fueron aquellos beneficiarios de viviendas de barrio o de Asistencia Financiera de Operatoria Individual. Por este plan se establecieron quitas de interés, planes de pago de entre 6 y 24 cuotas y beneficios para cumplidores.
En estos meses, más de 16 mil personas se acercaron a la planta baja del Centro Cívico para consultar por su situación y 7.000 familias adhirieron a la moratoria. Los números finales de este plan cumplieron con las expectativas del IPV, ya que se cancelaron 1.579 viviendas. Además, como beneficio complementario para el sistema, esto posibilita mayor celeridad administrativa ya que se agilizan los trámites de cobro para quienes todavía están pagando sus cuotas.
A través del Plan de Regularización de Deudas se percibió entre pagos y adhesiones a planes de moratoria $95 millones de los cuales $10 millones corresponden a la cancelación de viviendas.
Si bien la moratoria ya finalizó, es importante destacar que aquellos beneficiarios que tienen sus cuotas al día hasta octubre de 2017 aún pueden acceder al beneficio de cancelación de su vivienda con un 20% de descuento. Esto rige hasta diciembre de 2018.
Sobre el cierre de este plan, el interventor de la repartición, Arq. Juan Pablo Notario, expresó: "El interés de los beneficiarios que se acercaron es un dato muy alentador y nos hace creer que podemos construir más viviendas para las familias sanjuaninas. Este mecanismo hace girar la rueda para conseguir fondos y poder brindar soluciones a quienes lo necesitan".