En ninguna mesa sanjuanina falta un buen dulce de membrillo casero. En pan, en mermelada o en jalea, las familias se pasan la receta de generación en generación y se transforman en un clásico del recetario familiar. Para revalorizar esta costumbre gastronómica, el Gobierno de San Juan lanzó un concurso que premia los mejores dulces en tres categorías distintas.
El jurado, formado por especialistas y aficionados, tuvo que elegir entre 47 muestras que se presentaron al concurso. En la categoría artesanal-familiar el primer premio se lo llevó María Contreras, el segundo Gabriela Rodríguez y la mención especial fue para Silvia Palma. En la categoría institucional el primer premio se lo llevó la escuela de Enología, el segundo el Centro Socio Educativo "Nazario Benavidez" y la mención especial fue para la escuela Industrial. Finalmente, en la categoría empresas el primer premio Productos Pons-Jorge Pons, el segundo fue para Fundación Cooperadora Escuela de Fruticultura y Enología y la mención especial para el dulce de la Profecía Monserrat.
El concurso se extendió durante dos jornadas, la primera se realizó en el salón "Cruce de Los Andes" del Centro Cívico y consistió en una cata dirigida a cargo de Adriana Turcato perteneciente al Panel de Cata de la Universidad Católica de Cuyo. En la segunda jornada se realizó un festival del dulce, que tuvo como estrella una cata dirigida al público.
El membrillo es uno de los principales cultivos frutícolas de San Juan. La capital de este frutal está en Jáchal. Son 700 las hectáreas cultivadas en la provincia y la mayor parte se destina a la elaboración de dulce. Este es el tercer concurso que se lanza para premiar a los mejores dulces de membrillo y la intención es posicionar el concurso. El gobernador Sergio Uñac participó en la premiación y dijo: "La provincia transita un camino de acompañamiento y apuesta al desarrollo agrícola, una incipiente ganadería, de potenciar la industria y generar actividades para que San Juan sea receptivo de turismo".
