Un accidente doméstico, en San Juan, terminó con un hombre procesado por homicidio culposo, ya que la consecuencia fue la muerte de una bebé de 6 meses. Todo ocurrió el pasado 29 de septiembre cuando Jesús Michel Zalazar fue a visitar a su amiga, mamá de la niña, y jugando con la bebé la levantó y las aspas de un ventilador de techo la mataron.
El juez Matías Parrón, del Quinto Juzgado Correccional, fue quien tomó la decisión de procesar a Zalazar porque entendió que hubo negligencia de su parte. "Advierto que existió negligencia, lo que significa la falta de precaución o la indiferencia por el acto que se realiza, como así también una imprudencia ya que Jesús Michel Zalazar realizó una conducta que manifiestamente implicaba una puesta en peligro de la bebé que estaba a su cuidado", argumentó el juez en su fallo, que fue publicado por el diario Tiempo de San Juan.
La nena se llamaba Yuliana del Carmen Sotayán y tenía seis meses. Ese domingo estaba con su mamá Ana Laura Rossel y la hermana de ésta, en la casa en la que vivían en el barrio Justo Castro I, en Caucete, un distrito agrícola al este de la provincia de San Juan. La mamá de la pequeña apoyó la versión de Zalazar que indicaba que todo había sido un accidente. De hecho, en la Policía, Ana Laura declaró que ese día ella hacía de comer y que la bebé lloraba, así que el amigo de la familia la alzó para calmarla. Fue en ese momento que la levantó y, accidentalmente, se golpeó con un ventilador de techo que estaba encendido.
La nena terminó con una fractura de cráneo con hundimiento frontal, contusión cerebral y síndrome convulsivo post traumático. Esas heridas le costaron la vida, ese mismo día cerca de las 23. Zalazar está procesado por homicidio culposo pero seguirá en libertad hasta el día del juicio.
"Debió representarse mentalmente que su conducta imprudente y negligente de levantar a una bebé justo debajo de un ventilador de techo en un movimiento traería como resultado el golpe de las aspas en la frágil cabeza de la infanta, no resultando menester ningún conocimiento ni preparación especial ni idoneidad alguna para percatarse que se encontraba en una vivienda de baja altura… y que levantando los brazos sosteniendo una bebé alcanzaba fácilmente esa altura, repito una conducta imprudente y negligente y fácilmente previsible", remarcó el juez.