Este domingo, se presentaron en París los exitosos resultados de un test de sangre para detectar tempranamente múltiples cánceres. La novedad fue probada en más de 6000 voluntarios mayores de 50 años. Si bien aún se está perfeccionando, adelantaron que podría identificar hasta 50 tumores sólidos y de la sangre de manera temprana, es decir, antes de que aparezcan los síntomas o las señales de alerta clínicas.
El estudio reconoce las alteraciones químicas que ocurren en fragmentos de ADN que se desprenden de los tumores en la sangre. El laboratorio utilizó inteligencia artificial para entrenar la tecnología en el reconocimiento de esa “señal” circulante.
La prueba llamada Galleri fue desarrollada por la firma estadounidense Grail, cuesta casi 1000 dólares y se realiza con indicación médica. Según detallaron, varios de los tumores que identifica el test (por ejemplo, de cabeza y cuello, esófago, ovario o algunos cánceres de la sangre) son más difíciles de diagnosticar en estadio inicial.
Los resultados se presentaron este domingo en el congreso de la Sociedad Europea de Oncología Clínica (ESMO, por su sigla en inglés) y parten de los 6621 participantes seleccionados en 11 centros de salud de Estados Unidos, pertenecientes a grupos con y sin riesgo oncológico.
Para seleccionar los voluntarios, se tuvo en cuenta que un 70% tuviera factores de riesgo, tales como: haber fumado por lo menos 100 cigarrillos en algún momento, tener alguna predisposición genética o hereditaria conocida, o haber recibido tres o más años antes algún tratamiento por un cáncer hematológico o invasivo, entre otros. El 30% de los participantes no tenían factores de riesgo.
La prueba detectó 92 positivos potenciales. Más tarde, los estudios convencionales confirmaron poco más de un tercio (38%) de esos casos: fueron cánceres de mama, hígado, pulmón, colon, ovario, páncreas y de la sangre. Mientras 14 estaban en una etapa inicial, hubo 26 tipos que no se suelen estudiar de rutina.
Por otro lado, un 0,9% de los positivos iniciales con el test terminó siendo un falso positivo. De este modo, se puede decir que la prueba tuvo una especificidad del 99,1%. En junio del año pasado, tras un estudio sobre más de 1200 voluntarios, investigadores del NHS habían afirmado que el test era “suficientemente preciso” como para avanzar a un estudio para definir su uso en personas sanas, sin síntomas.
Con la detección temprana, se necesitarán más profesionales
Los resultados del estudio Pathfinder, publicados en la revista Annals of Oncology, son para Deborah Schrag, del Centro de Oncología Memorial Sloan Kettering de Nueva York, “un primer paso importante en el uso de los tests de detección temprana del cáncer porque demostraron tener una buena tasa de detección (1,4%) y una excelente especificidad en individuos sin cáncer”.
“En las personas con un test positivo demandó menos de dos meses confirmar el diagnóstico si tenían cáncer y un poco más si no tenían la enfermedad, porque los médicos optaron por hacer estudios por imágenes y luego repetirlos varios meses después para investigar la posibilidad de que surgiera el diagnóstico de un cáncer”, explicó Schrag.
Por su parte, desde la ESMO destacaron que se trata del primer estudio prospectivo que demuestra que un test de detección temprana en sangre de tumores múltiples es tecnología capaz de identificar la enfermedad en pacientes con cáncer aún sin diagnosticar. Anteriormente, las investigaciones se habían hecho con tests en pacientes oncológicos.
Sin embargo, Schrag insistió en la importancia de que la población continúe haciéndose los estudios recomendados para la detección oportuna de cánceres como el de mama, colon/recto, próstata o cuello uterino. A partir de los resultados que se vayan obteniendo de nuevos estudios en marcha se podrá determinar, en los próximos años, a quién testear y cuándo hacerlo.
“Es tarea de las sociedades profesionales como la ESMO generar conciencia de que en los próximos cinco años necesitaremos más médicos, cirujanos y enfermeros, junto con más infraestructura diagnóstica y terapéutica, para atender la cantidad creciente de pacientes que se identificarán con los tests de detección temprana de cánceres múltiples”, subrayó Fabrice André, codirector científico del congreso y presidente electo de la sociedad científica.
Para André, que es director de Investigación del Centro de Oncología Gustave Roussy, en Francia: “Es necesario consensuar quién será testeado y cuándo y cómo se harán los testeos, además de anticiparse a los cambios por venir con la aparición de estos tests en, por ejemplo, el diagnóstico y el tratamiento de las personas con cáncer de páncreas y otros tumores que suelen diagnosticarse en una etapa muy avanzada”.