En los últimos meses, organizaciones sociales y políticas de todo el país notaron un aumento en las filas de los comedores y merenderos, por lo que se manifestaron en el día de ayer en distintas provincias para pedir fortalecer la ayuda. La manifestación local fue en el macrocentro salteño, sosteniendo que los centros asistenciales cuadriplicaron su demanda.
Dos años atrás había entre 3 y 5 comedores y merenderos, mientras que ahora hay 16 como remarcó Jorgelina Franco, la dirigente del Polo Obrero en diálogo con El Tribuno. Según Franco, cuatro centros alimentarios más del interior están en trámite, por lo que llegarían a 20. Estos nuevos establecimientos abrirían en San Carlos, Talavera y Las Lajitas, sectores donde hay un avance de la soja.
Además de los centros urbanos, se suman los comedores de comunidades originarias en Misión Chaqueña, Carboncito y Salim, que se sumaron al reclamo y pidieron por los desmontes de Joaquín V. González. Durante los últimos meses aumentó la asistencia social espontánea, por lo que estos comedores y merenderos se multiplicaron, y también necesitan ayudar a más personas a causa de la pandemia.
En general, todos los que asisten para una merienda o almuerzo son trabajadores independientes, cíclicos o madres solteras, con familias numerosas. Por otra parte, los organizadores sociales también solicitaron alimentos de mejor calidad para poder cubrir las necesidades. Desde Nación les enviaron arvejas y choclo, que no tienen utilidad cotidiana; en lugar de enviar leche, azúcar, arroz, fideos o harina.
Finalmente, también recordaron que están en un contexto económico complicado por que se venció el decreto de congelamiento de servicios públicos, por lo que aumentarán la luz, el colectivo y el agua.