El diputado nacional por Salta, Martín Grande, es uno de los firmantes del proyecto que solicita juicio político para el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero. El pedido se basa en la prolongada ausencia de Cafiero en el Congreso, ya que la Constitución establece que el jefe de Gabinete debe comparecer una vez por mes, y ya pasaron 271 días desde su última visita a Diputados.
Grande se mostró indignado en las redes sociales y aseguró que “tuvieron un año para prepararse y hoy estamos sin vacunas y sin nadie que se responsabilice. Exigimos que el Gobierno nos explique donde estamos parados”.
El proyecto
Presentado por el diputado nacional de Juntos por el Cambio y vicepresidente del PRO, Federico Angelini, el proyecto plantea que la usencia de Cafiero representa una falta de “gravedad institucional inusitada”.
“Entendemos que se ha incurrido en el encuadramiento constitucional del Artículo 53 de la Constitución Nacional para promover juicio político por las causales de mal desempeño o por eventuales faltas en el ejercicio de sus funciones”, reza el proyecto. Y asegura que “es evidente la desidia del funcionario a dar cumplimiento a sus obligaciones constitucionales”.
“Hoy, desde la oposición, nos vemos obligados a cuestionar y a controlar más de cerca a un gobierno que, mientras te decía ´quedate en casa´, avalaba la liberación de presos y un vacunatorio VIP, y avanzaba contra la Justicia, la propiedad privada y el poder adquisitivo de los jubilados. Y, en ese sentido, es nuestro rol insistir para que los funcionarios den las explicaciones correspondientes”.
Por otra parte, Josefina Mendoza, diputada radical, le envió una carta a Sergio Massa para pedir que coloque un contador en el recinto con el tiempo transcurrido sin Cafiero un recinto. En ella argumenta que este contador “cumpliría una función de recordatorio para todos aquellos que ejercemos una función pública, de cumplir con lo que manda nuestra máxima norma y más teniendo en cuenta que en nuestro país y el mundo, se viven circunstancias y momentos en donde se exige de las principales figuras de los gobiernos el máximo de cautela, el máximo de diálogo, el máximo de consenso y esos consensos se generan en los ámbitos naturales de representación política”.
