El General Martín Miguel de Güemes, es sin dudas la figura patriótica más importante para los salteños, tan importante que es venerada en todo el territorio provincial, y en cuyo honor sus gauchos desfilan frente al monumento erigido en su honor todos los 17 de junio.
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El 17 de junio de este año tenía un condimento especial, y es que se cumplían 200 años del paso a la inmortalidad del Héroe Gaucho. Además, el bicentenario llegó en un contexto de pandemia, por lo que hubo un largo tira y afloje entre el Gobierno de Gustavo Sáenz y los Gauchos de Güemes para decidir si había desfile o se cancelaba.
Finalmente, el desfile fue cancelado y sólo contaría con la participación de políticos y representantes de los gauchos. Además, el homenaje contaría con la presencia del presidente, Alberto Fernández. Pero, la demagogia política hizo de las suyas y las calles de Salta se llenaron de militantes de la Cámpora que, con banderas y bombos, brindaron su apoyo al presidente.
La injusticia rápidamente provocó la indignación de los salteños, que no tardaron en repudiar el bochornoso homenaje a su General, considerando que les “robaron su homenaje”.
Finalmente, luego del escándalo, se decidió que el tan ansiado desfile de homenaje se realizaría el día 8 de agosto. Pero, los gauchos pidieron que en esta oportunidad los políticos dejen en paz al Güemes, y que los homenajes sean solamente del pueblo.
A pesar de este pedido, el gobernador se Salta se presentó a caballo a rendir su homenaje Martín Miguel de Güemes, y este hecho volvió a generar indignación entre los gauchos, al punto que varios fortines se retiraron del desfile en repudio a la presencia de Gustavo Sáenz.
En un comunicado, los gauchos consideran que la actitud del gobernador “es una muestra evidente de oportunismo político, dado que ocurre justo una semana antes de las elecciones”. Además, consideran que “el gobernador pretendió ‘colgarse’ del evento para hacer campaña y lavar su imagen tras lo ocurrido”.
El comunicado relata que por este motivo varios gauchos decidieron bajarse del caballo y abandonar el acto, “en repudio a la actitud electoralista del gobernador”, y que incluso gauchos que habían venido de Buenos Aires, Córdoba y San Luis, decidieron imitar esta actitud y retirarse del desfile.
El comunicado finaliza con una profunda reflexión: “La política partidaria cumple una función crucial en una sociedad democrática. Somos los primeros en reconocerla y valorarla. Pero cuando usurpa todos los espacios, cuando trasciende sus límites naturales y busca imponerse, se torna abusiva. Los políticos deben entender, de una vez por todas, que no en todos los momentos son necesarios, ni en todos los lugares son bienvenidos”.
En las redes sociales, Gustavo Sáenz compartió imágenes de él desfilando en honor a Güemes, pero los usuarios le hicieron sentir el rigor por lo ocurrido en junio pasado.
