En la primera jornada del juicio por el crimen del María Leonor Gine declararon las cuatro hijas de la víctima, entre ellas la mamá del principal acusado, también el padre del joven. Todos coincidieron en afirmar que Agustín Morales padecía problemas de adicción desde la adolescencia. También dio su testimonio un policía que ingresó a la vivienda de la víctima minutos después del hallazgo del cuerpo.
La madre de Morales, María José, y el padre, Cristián, relataron que su hijo les dijo que no recordaba nada de lo que había sucedido. También revelaron que el hijo empezó a consumir drogas desde la adolescencia y que una de las personas que más lo había apoyado era su abuela Leonor, quien habría decidido que estuviera con ella mientras esperaban internarlo en un centro en Buenos Aires.
La madre dijo que no le daban dinero al joven para que no comprara droga, pero él vendía sus zapatillas y sus celulares. El padre, por su parte, indicó que llegó a sustraer la batería del vehículo de su abuelo paterno para conseguir estupefacientes.
El padre, la madre y las tres tías que declararon que Gine amaba a su nieto, que tenían una buena relación y no encuentran explicaciones para lo que pasó. Declararon que el joven no era agresivo con ellos ni con la abuela. También el único que dijo que lo visita en el penal es su padre. La mamá relató que lo fue a ver tres veces en las que esperaba de él una explicación pero él le respondió que no recordaba, entonces no regresó.