El sábado al mediodía, la docente Sandra Palomo, de 53 años, salió de su casa en su camioneta Toyota Hilux y no regresó a su hogar. Al pasar las horas, su familia radicó la denuncia en la policía, que comenzó con un fuerte operativo de búsqueda que terminó con la localización de la camioneta y celular de la docente.
Cerca de las 10:30 de la mañana, una vecina que salió a buscar un caballo en las afueras de barrio salteño Don Emilio, cerca del río Arenales, y descubrió el cuerpo de una mujer ensangrentado entre la maleza.
Inmediatamente la mujer dio aviso a la policía que constató que podía tratarse de la docente desaparecida, y trasladaron el cuerpo al Servicio de Tanatología Forense del Cuerpo de Investigaciones Fiscales.
La autopsia fue larga y duró más de cinco horas, y determinó que la causa de la muerte fue un shock hipovolémico, es decir, que la docente murió desangrada a causa de las heridas de arma blanca.
La familia de la docente es oriunda de la provincia de Formosa, y se encuentran desconsolados por la terrible noticia. Confirmaron que el cuerpo no será enterrado hasta tanto la Fiscalía les confirme que pueden hacerlo.
