La denuncia fue realizada por el hermano de la menor al tomar conocimiento que la adolescente de 14 años mantenía un vínculo íntimo con un hombre de 34 años, que aprovechó su situación de vulnerabilidad y su inmadurez para vulnerar su integridad sexual.
El juez Diego Rodríguez Pipino, luego de recibir la confesión del acusado y la aceptación de los hechos que se le imputan, lo condenó a la pena de 3 años de prisión de ejecución condicional y le impuso reglas de conducta tales como la prohibición de acercamiento a la víctima y de mantener todo tipo de contacto.
En el mismo fallo dispuso que se le extraiga material genético por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos.