Luego de la saga de violentos ataques a sedes y figuras emblemáticas de Newell’s y Rosario Central, el ministro de Seguridad, Jorge Lagna, se reunió con los presidentes de los clubes Ignacio Astore y Rodolfo Di Pollina. Establecieron una agenda común previa a todos los partidos para analizar medidas de seguridad para ambos clubes.
“Fue una reunión importantísima no solo por la coyuntura en la que vivimos, muy triste y repudiable, porque los vándalos que han cometido estos hechos tienen que estar presos, desde la rotura de la estatua de Isaac Newell’s hasta el hecho más grave que sucedió en la sede de Rosario Central”, dijo Lagna tras el encuentro.
El funcionario consideró que es necesario demostrarle al mundo rosarino y futbolístico que “unos pocos violentos no nos tienen que hacer perder el norte de la paz y la tranquilidad que tiene que reinar en el fútbol, que es una fiesta, son el clásico más apasionante del fútbol argentino, pero lamentablemente nos ha unido una coyuntura muy fea”.
Lagna también señaló que la mesa de trabajo fue conformada con una agenda en común que trasciende los niveles de seguridad que tiene que tener cada cancha y los operativos de cada partido.
“Desde el punto de vista desde la institución hacemos el pedido concreto para minimizar riesgos y también en función dirigencial bajar tranquilidad a los socios y a las socias”, dijo Astore. Por su parte, Di Pollina indicó que “el golpe fue duro, hay daños materiales importantes pero lo simbólico daña el tejido social y como dirigente estamos haciendo lo que hay que hacer para bajar un mensaje de paz y una agenda para trabajar en conjunto”.