El presidente Javier Milei no viajará a Rosario el próximo jueves 20 de junio para participar del acto oficial por el Día de la Bandera. La información fue confirmada por el municipio local y por fuentes del Gobierno nacional, que descartaron la presencia del mandatario en una de las ceremonias patrias más emblemáticas del país.
La ausencia de Milei fue confirmada por el secretario general de la Municipalidad de Rosario, Sebastián Chale, quien explicó que desde el Gobierno nacional notificaron que el presidente no formará parte del evento. Según se informó, no se dieron detalles sobre los motivos de la decisión.
A pesar de la ausencia presidencial, el acto en el Monumento Nacional a la Bandera se realizará con normalidad. La ceremonia será encabezada por el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, y el intendente de Rosario, Pablo Javkin. También se espera la presencia de autoridades provinciales, municipales, excombatientes de Malvinas y representantes de instituciones locales.

El acto del 20 de junio conmemora el fallecimiento del general Manuel Belgrano, creador de la bandera argentina, y suele contar con una gran participación ciudadana y la tradicional promesa de lealtad a la enseña patria por parte de alumnos de cuarto grado.
Desde la organización confirmaron que se mantendrán todas las actividades previstas, incluyendo el desfile cívico-militar y los espectáculos culturales que acompañan la conmemoración. La jornada es considerada una de las más significativas para Rosario, ciudad que alberga el Monumento a la Bandera.

El presidente Milei había generado expectativas sobre su posible presencia, dado que en ediciones anteriores otros mandatarios nacionales encabezaron el acto. Sin embargo, esta vez optó por no asistir, una decisión que ya generó repercusiones en el ámbito político local.
No se descarta que representantes del Gobierno nacional viajen en su lugar, aunque hasta el momento no hay confirmación oficial sobre quién podría asistir en representación de la Presidencia. En paralelo, tanto Pullaro como Javkin destacaron la importancia de preservar la institucionalidad del evento, más allá de la decisión del jefe de Estado.