Este martes al mediodía, una persecución derivada de un intento fallido de identificar a dos motociclistas, implicó un impresionante siniestro vial en la zona de 27 de febrero y Buenos Aires, en el sur de Rosario. Uno de los patrulleros chocó contra un Fiat Uno, provocando lesiones de gravedad en los ocupantes y que un nene de 10 años saliera despedido del vehículo.
Todo sucedió pasadas las 12 del mediodía, cuando una camioneta de la Policía Provincial, que participaba de una persecución a un motociclista, pasó un semáforo en rojo a gran velocidad y colisionó en el cruce de la avenida 27 de febrero y Buenos Aires con un auto particular.
Según fuentes policiales, el siniestro derivó de un hecho ocurrido en Tucumán y Corrientes, cuando personal de la Brigada Motorizada pidió a un motociclista que se identificara y este huyó. El sospechoso fue perseguido aún luego del siniestro vial y quedó atrapado en Ayacucho al 4000.
Previo a esto, protagonizó otro siniestro vial en Alem y Gaboto, en el que un suboficial de la Motorizada derrapó y cayó al suelo, aunque no hubo más heridos. Al hacer averiguaciones, la policía descubrió que la moto tenía pedido de captura.
¿Cómo están los ocupantes de los vehículos involucrados en el choque?
Como consecuencia del impacto, el vehículo familiar dio varios giros y el patrullero atravesó el cantero central, cruzando el carril contrario y chocando contra otro vehículo.
El impacto con el Fiat Uno lo dejó destrozado en su parte delantera y a sus ocupantes, entre ellos un niño que salió despedido del vehículo, con heridas graves. Para retirar al hombre, debió asistir personal de Bomberos, ya que los fierros impedían que se pudiera abrir el auto.
El nene de 10 años que salió despedido del auto por el choque fue llevado al Hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde se encuentra hemodinámicamente estable. Entró con politraumatismos y una fractura de clavícula. Su hermana de 6 años ingresó con lesiones en el rostro y en el cuerpo.