El abogado de los detenidos por la golpiza al hijo de Valeria Mazza aseguró este miércoles que ambos están “absolutamente arrepentidos” de lo ocurrido. Frente a la denuncia de que le pegaron por “Tincho”, consideró que sus clientes actuaron “mal” pero sostuvo que se trató de un “accidente”.
El defensor de los jóvenes de 26 y 27 años afirmó que son “buenas personas” y no tienen antecedentes penales. “Son gente de trabajo, con pareja y una vida estable”, expresó respecto de su situación en las localidades vecinas de Funes y Roldán, donde la Agencia de Investigación Criminal (AIC) hizo allanamientos mientras se entregaban por la denuncia de la agresión a Tiziano Gravier.
A pesar de que el video de las trompadas se viralizó hace más de dos días, el letrado explicó que recién se presentaron ante la Justicia este miércoles porque “no conocían lo que había pasado realmente” la madrugada del domingo después su visita al boliche de Brown y Avenida Francia. “No imaginaron que había sufrido una lesión grave”, comentó respecto de los puñetazos al hijo de Valeria Mazza.
Bedouret confirmó que los muchachos detenidos estuvieron en el lugar y entonces se produjo un “desencuentro” con el deportista de 20 años, que había ido a encontrarse con unas amigas junto a su hermano Benicio Gravier. En cuanto a la denuncia, replicó que “hubo una suerte de pelea” o “discusión” e incluso deslizó la posibilidad de una “provocación” por parte de la víctima.
“Acá lo importante es que Tiziano esté bien, que los chicos aprendan a comportarse de una manera determinada”, concluyó el defensor en vísperas de la audiencia imputativa. A continuación, expresó: “Gracias a Dios no ha psaado nada demasiado grave”.
Por otra parte, el abogado advirtió que espera un “juicio justo” e “igualitario” en el marco del proceso penal por la agresión al hijo de Valeria Mazza. Al respecto, subrayó que el caso tuvo una “mediatización muy llamativa” y aludió a la “influencias de altos funcionarios” en el abordaje del mismo.
“No hubo armas ni tiros. Fue una piña, tal vez con un daño impensado”, opinó Bedouret en un reportaje con Canal 3. Por otra parte, se quejó de los allanamientos realizados en Funes y Roldán. En concreto, denunció que la policía “rompió todo a su paso” cuando sus clientes ya iban a entregarse.