Estuvo diez años vacío y sin actividades. Los presuntos usurpadores, ligados a una inmobiliaria del centro, sólo lo utilizaban para fiestas y eventos privados, pero finalmente cedieron la posesión ante la movida de un grupo de vecinos de barrio Echesortu, quienes en octubre recuperaron el Club Social y Deportivo Cóndor.
"Empezamos en 2015 y hoy somos un grupo de 15 personas de la nueva comisión, más familiares y amigos que estamos trabajando para terminar de ponerlo en marcha", le contó Matías Corvezola a Vía Rosario,
La semana pasada, la institución participó de los carnavales organizados en la Plaza Buratovich, a la vuelta del club. A partir de marzo comenzarán a brindar casi una decena de talleres con acceso gratuito para menores de 15 años y un costo de 30 pesos para el resto de la comunidad.
Matías explicó que el valor de la cuota societaria "es lo mínimo que pide Fiscalía de Estado" dentro de los términos en los que debe funcionar el club. Si bien consiguieron reunir algo de dinero durante los festejos del fin de semana anterior, reconoció que aún faltan recursos y equipamiento para sobreponerse al saqueo.
El integrante de la Comisión Directiva detalló que los usurpadores fueron desplazados el año pasado. Sin embargo, volvieron a la carga en algún momento antes del día en que abrieron las puertas formalmente. "Cuando fuimos, no andaba la llave. Ahí descubrimos que habían cambiado las cerraduras y se habían llevado todo lo que quedaba".
El grupo que se había apropiado del club durante la última década se robó el tanque y la bomba de agua entre otros elementos, por lo que los vecinos siguen pidiendo colaboración para completar las instalaciones y rehabilitar los servicios básicos en Cafferata y Zeballos.
Corvezola comentó que los antiguos administradores "cobraban subsidios de la Provincia" en nombre de la entidad pero "nunca" dieron la cara desde que comenzó el proceso de recuperación de la institución.
