El próximo 3 de noviembre, Newell's Old Boys celebrará sus 115 años de vida y ya tiene listo el primer regalo, probablemente también el más importante. Ese día quedará inaugurado formalmente el hotel donado por Marcelo Bielsa al club de sus amores.
El "Loco" no sólo aportó 2 millones de dólares para la construcción del flamante edificio sino que además contó con la ayuda de su hermana María Eugenia Bielsa como una de las arquitectas a cargo del diseño. El resultado de la iniciativa es un edificio que tiene 2.000 metros cuadrados y fue construido en el corazón del predio donde la Lepra entrena habitualmente.
Desde el Parque de la Independencia aclararon que la obra concluyó hace algunos meses, pero faltaba todavía conectar los servicios básicos y dotar de accesorios el interior de las instalaciones. Todos estos gastos sí corrieron por cuenta de la institución.
El flamante activo que se incorporó al patrimonio rojinegro cuenta con cinco plantas y se ubica entre los vestuarios de Primera y las canchas de entrenamiento. En la planta baja hay con un garaje para los automóviles y un ingreso especial con estacionamiento para el micro que transporta al plantel profesional.
La frutilla del postre para el proyecto que lleva el sello de Bielsa será el bautismo como homenaje a Jorge Bernardo Griffa, un emblema de la mejor época futbolística de la historia de Newell's. Más allá de cumplir con la misión fundamental de ahorrar tiempo y dinero al dejar de lado la concentración en Ricardone, el hotel mejorará las condiciones actuales con la oferta de una sala de usos múltiples, un auditorio, sala de videos y nuevos vestuarios.
