El Ministerio de Salud de Santa Fe entregó este jueves una certificación inédita en la provincia para un perro de servicio, el cual a principios de año se encontró con una nena con discapacidad a la que acompaña desde entonces para mejorar su calidad de vida.
La labradora adiestrada conoció a Brisa en el marco del programa "Huellas de Esperanza", una iniciativa del Servicio Penitenciario Federal que apunta a que las mascotas puedan colaborar en la actividad diaria de personas que tienen problemas motrices o de otra índole.
La niña de 9 años vive en Funes y desde julio cuenta con la compañía de Paz tanto en su casa como en la escuela y la normativa a nivel local, provincial y nacional les permiten ir juntas a todos los espacios públicos y privados de uso común. El único recaudo que deben tomar quienes se encuentran con ellas es no distraer a la mascota.
La entrenadora Sofía García fue la encargada de conducir la prueba de fuego a principios de año, cuando la perra y su nueva dueña se conocieron y felizmente la relación progresó a través de visitas periódicas a la casa de Brisa. De esta forma, la menor que padece atrofia muscular espinal accedió a un acompañamiento sin antecedentes en la provincia.
Este jueves, la intendenta Mónica Fein asistió a la entrega del primer carné emitido para un animal de este tipo. La nena y su mascota visitaron la sede del Imusa (Instituto Municipal de Salud Animal), donde también fueron recibidas por el subsecretario de Inclusión para Personas con Discapacidad, Maximiliano Marc.