La Justicia Federal investiga a ocho intendentes o ex mandatarios de la región por presunta malversación de fondos que debían ir destinados a la construcción de plantas de tratamiento de residuos. Algunas de ellas nunca se hicieron, mientras que otras quedaron a medio terminar.
La causa es impulsada por el juez federal Claudio Bonadío, y ya tiene procesados a los ex jefes de Gabinete, Aníbal Fernández y Jorge Capitanich. A nivel nacional, son 58 los intendentes y jefes comunales del Frente para la Victoria investigados, algunos de ellos con mandato cumplido.
Concretamente se los acusa de haber recibido $2 millones, que serían $6 millones a valores de hoy, entre 2013 y 2015 que debían destinarse a la construcción de plantas de residuos sólidos urbanos bajo el programa Girsu.
En la región los apuntados son el intendente de Venado Tuerto –y ex presidente del PJ santafesino-, José Luis Freyre, y su par de Casilda, Juan Carlos Baclini. También se apuntó contra el jefe comunal de El Trébol, Fernando Almada, y están investigados los ex mandatarios de Rufino, Gustavo Deheza, y de Bouquet, Guillermo Cornaglia.
Por último, en el listado que tiene Boandío para tomar declaración indagatoria también figuran la ex mandataria de Serodino, Mónica Stumpo, y los ex jefes comunales de Pavón, Carlos Godoy y José López.
En el caso de Venado Tuerto, la planta de tratamiento de residuos no está terminada y la idea sería pedirle fondos a la Provincia. Freyre ya prestó declaración ante el juez el 31 de julio pero ocultó la información, que recién salió a la luz esta semana por un pedido de informes de la oposición.
En El Trébol, la planta se terminó a los apurones y para la foto. De hecho no tiene luz ni agua, según informó Canal 3.