Celebración de la Pachamama: ¿dónde conseguir caña con ruda?

La celebración suma cada vez más adeptos que buscan comenzar el nuevo mes protegidos contra las malas ondas, la envidia ajena y la mala suerte. 

Celebración de la Pachamama: ¿dónde conseguir caña con ruda?
Se podrá comprar la tradicional bebida en las ferias de la Economía Social y en los mercados del Patio y de Aromas y Sabores\u002E

Este miércoles se celebra la Pachamama.  Dicen que si se bebe caña con ruda en ayunas, esta aleja maleficios y atrae la buena salud y fortuna. A quienes quieran sumarse al rito podrán acercarse al centro donde se entregará de manera gratuita el brebaje.

"Julio los prepara y agosto se los lleva", es un dicho de los pueblos originarios. Para alejar el "maleficio", decidieron hacer una suerte de conjuro muy fácil de preparar pero que requiere meses de añejamiento, por lo que la mayoría opta por comprarlo.

La tradicional bebida podrá adquirirse durante la mañana en las habituales ferias de la Economía Social emplazadas en plazas y centros distritales, en el BioMercado del Mercado del Patio (Cafferata 729) y en el Mercado de Aromas y Sabores (Córdoba 1358, primer piso).

Además, para quienes quieran sumarse a la celebración colectiva, podrán acercarse de 7 a 9 al ingreso del centro comercial Palace Garden, donde se entregará la caña con ruda de manera gratuita.

Por qué hay que tomar caña con ruda.
Por qué hay que tomar caña con ruda.

¿Por qué se toma la caña con ruda?

Tres tragos de caña con ruda al empezar el día “espantan todos los males del invierno”, incluidas las enfermedades que suelen aparecer en estas épocas. Antiguamente, los guaraníes entendían que era en agosto cuando se producía la mayor cantidad de muertes por frío y lluvias. "Julio los prepara y agosto se los lleva", decía un conocido refrán.

El rito proviene de los guaraníes, que utilizaban la ruda para la medicina, especialmente contra los parásitos, malestares estomacales y la irritación de picaduras de bichos. Pero más allá de sus propiedades medicinales, con el paso del tiempo la ingesta del brebaje se convirtió en una suerte de conjuro.