La interna entre el Gobierno de Santa Fe y la Municipalidad de la ciudad capital en torno a la labor de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) pasó este fin de semana al terreno salarial, tal como había sugerido el intendente José Corral al afirmar que la compañía paga haberes "de privilegio" a sus máximos responsables.
El presidente la firma Maximiliano Neri y el resto de los miembros del directorio estatal tienen sueldos brutos de $431.007,66, cifra se ubica al tope de una nómina con valores que oscilan entre los 290 y los 404 mil pesos. Esta segunda franja incluye a gerentes y también a jefes de sucursales.
Los montos antes descritos duplican el salario bruto del gobernador Miguel Lifschitz, quien en junio cobró 137 mil pesos netos tras la liquidación de 212 mil. En el repaso de lo que ocurre con los otros poderes del Estado, la remuneración para los principales cargos de la EPE sólo es comparable a la de la Corte Suprema provincial, cuyos ministros tienen planillas de entre 350 y 463 mil pesos sobre las cuales luego se aplicarán diferentes descuentos y aportes.
Los números que dio a conocer este domingo La Capital alimentan la crítica que había hecho Corral en torno a la administración de la prestadora de energía. Cabe recordar que la compañía y el Ejecutivo santafesino vienen cruzando denuncias por conexiones ilegales en dependencias estatales. A eso se suma el plan de ajuste anunciado por la empresa la semana anterior para reducir gastos operativos.
Los salarios de $76.158 netos del gabinete de Lifschitz quedan muy por debajo de lo que cobran las autoridades de la EPE y lo mismo ocurre en la Legislatura, donde los diputados y senadores reciben entre 90 y 120 mil pesos mensuales de bolsillo.