A casi un año de la muerte de María de los Ángeles Paris, y basándose en los resultados de la segunda autopsia, la familia ratifica que la bibliotecaria murió a causa de las lesiones que le provocaron en la comisaría 10°. Pide reunirse con el gobernador, Miguel Lifschitz y con los miembros de la Corte Suprema de Justicia provincial.
Cabe recordar que esta segunda autopsia se realizó el 3 de octubre en la Morgue Judicial dependiente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, y el dictamen determinó que María de los Ángeles no falleció de muerte natural, tal como había sostenido el fiscal Luis Schiappa Pietra. De acuerdo a este nuevo estudio, su muerte fue el resultado de haber sido violentamente privada de la libertad, golpeada esposada y sostenida boca abajo por la fuerza.
Mediante un comunicado, la familia de Paris aseveró que la perito de Morgue Judicial de la Nación, Dra. Bustos y la perito de parte, Virginia Creimer, dictaminaron "no sólo que la primera autopsia fue incompleta, que no fue metódica, ni adecuadamente ilustrada y por lo tanto violó las reglas establecidas por el Protocolo de Minnesota de la ONU para los casos de muerte en custodia, sino que también omitieron la investigación interna del cuello y el ineludible estudio radiológico".
En esta nueva autopsia las expertas forenses concluyeron además que la causa de muerte fue "una arritmia cardíaca fatal, como consecuencia de un estado hiperadrenérgico (síndrome confusional agudo / agitación psicomotriz / delirio excitado) generados por un mecanismo de desequilibrios a nivel molecular y electrolíticos ya explicados y constatados en los estudios realizados, coadyuvado por la hipoxia producida como consecuencia de la restricción física a la que fue sometida (asfixia posicional)".
Los politraumatismos producidos en vida fueron constatados en el brazo izquierdo, en la cara externa de la rodilla derecha, en el codo derecho, en la cara externa de tobillo y dorso del pie izquierdo, en la zona lumbar derecha, en la zona subescapular derecha, en los tejidos blandos cervicales a la altura de la tráquea, en la muñeca derecha y en fractura de dos arcos costales. "Todos los cuales tuvieron entidad suficiente para generar la descarga hiperadrenérgica a la que hace alusión el dictamen forense", apunta.
Es decir, todas lesiones compatibles con prácticas policiales características de malos tratos y torturas, como lo indicara la Dra. Creimer, ya en las primeras declaraciones luego de la realización de la segunda autopsia.
"Nada de esto hubiera sucedido si María de los Ángeles no hubiera sido ilegalmente y violentamente detenida, golpeada, y torturada", asevera el escrito.
Por último, responsabilizan al Gobierno provincial de lo ocurrido y exigen una reunión urgente con el gobernador y con la Corte Suprema, para que arbitre sobre el Instituto Médico Legal donde le realizaron la primera autopsia.